INVESTIGADORES
ARZAMENDIA yanina
congresos y reuniones científicas
Título:
AVANCES, AMENAZAS, OPORTUNIDADES Y DESAFÍOS EN EL MANEJO DE LA VICUÑA COMO ESTRATEGIA DE CONSERVACIÓN.
Autor/es:
ARZAMENDIA, Y.; BALDO, J. L.; ROJO, V.; VILÁ, B. L.
Lugar:
Tilcara, Jujuy
Reunión:
Jornada; 2das. Jornadas del Altiplano Sur. Miradas interdisciplinarias; 2018
Institución organizadora:
Centro Universitario Tilcara, FILO; UBA
Resumen:
El principal uso material de la vicuña (Vicugna vicugna) en la actualidad, está basado en la obtención de fibra a partir de la esquila de animales silvestres vivos (chaku). El chaku es una oportunidad de importancia socio-económica para los pobladores del altiplano andino ya que se obtiene una fibra de alto valor de mercado. La vicuña (asociada a las culturas andinas desde hace unos 11000 años), estuvo al borde de la extinción en la década de 1960 debido a la caza iniciada desde la conquista para obtener su piel. Desde hace unas décadas, la vicuña se ha recuperado en gran parte de su área de distribución. Se ha estudiado que el manejo de vicuñas silvestres puede ser un modelo de uso sostenible, porque, con buenas prácticas integraría la conservación de la especie y su hábitat con el desarrollo local. Sin embargo, después de dos décadas de uso de la especie, la implementación de planes de manejo basados en su uso y conservación es todavía muy disímil en los países vicuñeros. Además, subsisten viejas amenazas como la caza furtiva, y han surgido otras derivadas de su utilización legal. En Argentina actualmente, se procura desarrollar un Plan Nacional de Manejo de la Vicuña. Considerando que las acciones derivadas de cualquier plan de manejo generan presiones en las poblaciones naturales, es muy importante conocer previamente las bases biológicas y sociales que serán afectadas por estas intervenciones para poder medir sus consecuencias, evitando o minimizando sus impactos negativos y potenciando los positivos. Este plan debería combinar las recomendaciones técnicas basadas en investigaciones científicas, las necesidades del poblador local y la ineludible conservación de esta especie silvestre. La conservación de las vicuñas como objetivo debería trascender las coyunturas y los intereses en conflicto de los diferentes estamentos de nuestra sociedad, y estar regido política y ejecutivamente por la valoración ética de la conservación de la biodiversidad. Para lograrlo, es imprescindible, entender e internalizar lo que constituye una especie silvestre, los procesos evolutivos, ecológicos y antrópicos que la afectan y la legislación que aplica. Por todo ello, un buen Plan de manejo debería constituirse en el producto de un proceso de valoración gubernamental para la toma de decisiones de proyectos y políticas de desarrollo, con actualizaciones en función de nuevas situaciones ambientales, aplicando además el criterio de precaución, para poder cumplir el objetivo de conservación de la vicuña.