BECAS
BARZOLA ELIZAGARAY PehuÉn
congresos y reuniones científicas
Título:
¿Avanzada del Estado o contraataque neoliberal? Pensando el desarrollo y los conflictos ambientales vinculados a Áreas Naturales Protegidas de Mendoza, desde una perspectiva histórica
Autor/es:
ARCOS, CAMILO; AGOGLIA, OFELIA; BARZOLA ELIZAGARAY, PEHUÉN; MORENO, EZEQUIEL
Lugar:
Santiago del Estero
Reunión:
Jornada; V Jornadas Nacionales de Ecología Política; 2021
Institución organizadora:
Universidad Nacional de Santiago del Estero
Resumen:
En este trabajo presentamos un análisis histórico del conservacionismo entendido como activismo que promueve la conser-vación de la naturaleza, principalmente a partir de áreas delimitadas para conservación in situ de la biodiversidad, es decir, Áreas Naturales Protegidas (ANP). Haciendo un recorrido a escala mundial y nacional observamos que tiene orígenes hacia fines del siglo XIX y principios del XX, a partir de dos vertientes: una europea y una norteamericana. Esta última, propone un paradigma de preservacionismo estricto y elitista, que pondera las bellezas paisajísticas y tiene funciones económico-políticas en la extensión y avance de los Estados Nacionales en zonas de frontera. La misma influirá en los principios del conservacio-nismo hegemónico moderno, y tendrá gran peso sobre el modelo adoptado en los primeros Parques Nacionales en Argentina. En ese marco, nuestro objetivo se orientó a comprender el surgimiento y desarrollo de las ANP en Mendoza, a partir de la revi-sión de fuentes secundarias y terciarias, para poder abordar con mayor comprensión histórica los desafíos actuales del Sistema de ANP.Así, un breve repaso por la historia del conservacionismo en la provincia de Mendoza, pone en evidencia el hecho de que las preocupaciones ecológicas que se consolidan en el imaginario ambiental mendocino, surgen como resultado de los primeros indicios de desertificación, producto de la sobreexplotación de territorios con bosques nativos, en el período socio-histórico en el que se configura un nuevo modelo productivo basado en la vitivinicultura (fines del siglo XIX principios del XX), sustituyendo al modelo forrajero/ganadero. A partir del desarrollo del sistema ferroviario, se favorece la circulación y transporte de leña, madera y carbón, para su propia expansión, pero también para el uso y desarrollo de la vitivinicultura, estableciéndose un modelo de concentración de recursos y población en los oasis, en desmedro de los territorios no-irrigados. Este modelo extractivo, centrado en la ?cultura del oasis?, se sustenta principalmente en la concentración del recurso hídrico, garantizado por el sistema jurídico provincial y los órganos de gestión que reglamentan sobre el uso y la distribución de aguas (la Ley de Aguas de 1884 y la Cons-titución Provincial de 1916). Éste favorece la concentración del manejo del recurso hídrico en los sectores que conforman las élites dominantes, durante el período de conformación de los Estados provinciales y nacionales (Abraham y Prieto, 1999; Esco-lar, Martín, Rojas, Saldi, Wagner, 2012; Martín, Rojas, y Saldi, 2010; D?Amico, 2017; Rubio, Fermani y Parera, 2014; entre otros).En ese marco histórico, se aprecian tres etapas principales del Sistema de ANP de Mendoza, según los criterios que aporta-ron los fundamentos para la creación y gestión de las mismas: a) de 1961 a 1980 en la cual se busca proteger de la sobreexplo-tación de recursos naturales en determinados territorios periféricos (criterios preservacionistas-recursistas); b) un segundo pe-ríodo, desde 1980 a 2000, en el que predomina la influencia del ámbito científico-ecológico a partir de una estrategia sustentada en la conservación de paisajes de gran particularidad por su belleza escénica y valores ambientales sobresalientes (criterios estético-científicos); c) un tercer y último período en transcurso, que expone una ampliación y diversificación de los criterios históricos, en el que emergen nuevas demandas, intereses y actores sociales, que a través de las ANP instrumentarían formas de control territorial (criterios político-territoriales). En el transcurso de las dos primeras etapas los actores centrales en torno a la creación y definición de criterios de conservación son el Estado provincial (a partir de la Dirección de Recursos Naturales Reno-vables, autoridad de aplicación según la ley 6045) y el Instituto Argentino de Investigación de Zonas Áridas (CONICET) quien también asume un rol central en la formulación y aprobación de planes de manejo de las ANP.Si bien en el tercer y último periodo se aplican otras estrategias de conservación complementarias, y el crecimiento en núme-ro y superficie de las ANP en es importante, su efectividad en la conservación de la naturaleza se ve condicionada por proble-mas de gestión, tales como la elaboración y actualización de planes de gestión, falta de recursos humanos, financiamiento einclusión y participación de los habitantes locales (Cannizo et al, 2020). Lo novedoso y desafiante de este tercer período (en transcurso), es que irrumpen nuevos actores y se vislumbra que la creación de ANP es un instrumento pretendido para el control territorial, más allá del fin específico de protección de la naturaleza y su efectiva aplicación. Tanto actores locales de la sociedad civil (ONG?s, asociaciones civiles, habitantes locales de zonas periurbanas, campesinos, pueblos originarios) y privados, o em-presas que crean reservas privadas o que firman acuerdos con el gobierno provincial, y en última instancia el Estado nacional que creó la primera ANP con esta jerarquía bajo la categoría de Reserva Nacional de la Defensa, en territorio del Ejército Argen-tino.El espectro de narrativas explicitadas por estos actores pueden ir desde la defensa de bienes comunes hasta la aplicación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas, pero muchas veces coexisten diversos intereses implícitos sobre el territorio en cuestión que se expresan a través de conflictos ambientales. Puede ocurrir que bajo un discurso de promoción am-biental o protección de la naturaleza preexistan intereses económicos no explicitados que como trasfondo pretenden el acapa-ramiento del territorio o recursos naturales. Estos procesos de green grabbing o land grabbing (Fairhead, Leach y Scoones, 2012) prosperan en períodos de retirada del Estado durante la neoliberalización de la sociedad, en los cuales incluso los discur-sos ?ambientalistas?, aunque a veces bienintencionados, pueden poner en riesgo la soberanía, y en última instancia ser perju-diciales para el control de los recursos naturales y del territorio (García Linera, 2012). En contrapartida, el Estado puede asumir un rol central en la protección de los territorios y recursos naturales estratégicos para su defensa y control soberano, y esto no es excluyente con la participación de actores locales, sino que incluso hacerlos partícipes puede ser una clave a la hora de pen-sar las nuevas ANP en tanto se pueda generar identidad y apropiación a la vez que se estimule la generación de puestos de trabajos en torno a su co-gestión.De este modo, partiendo del análisis de los conflictos ambientales en torno a ANP y los intereses que estos develan sobre el territorio, a partir de esta ponencia pretendemos abrir el debate sobre el eje ?conflictos ambientales-desarrollo? en clave de pen-sar articulaciones público-privadas y entre el Estado y las organizaciones sociales (u otras representaciones de la sociedad civil) que, lejos de neutralizar el contenido político o intentar resolver dichos conflictos, enriquezca a las reflexiones posibles sobre el rol del Estado en la búsqueda de ?otro desarrollo posible? desde una perspectiva histórica y desde realismo político actualizado a las nuevas demandas sociales.