BECAS
CUMPLIDO ESMORIS Mariano JosÉ
congresos y reuniones científicas
Título:
CONCENTRACIÓN DE TOXINA PARALIZANTE EN GASTERÓPODOS MARINOS CON POTENCIAL PESQUERO
Autor/es:
ROCÍO NIETO VILELA; MARIANO CUMPLIDO; VIVIANA SASTRE; GERMÁN MARINO; LIVIO SALA; PABLO TAIBO; DIEGO BAULDE; GREGORIO BIGATTI
Reunión:
Congreso; 1er Congreso de Malacología; 2013
Resumen:
El creciente consumo de gasterópodos marinos en Chubut en restaurantes o familias, está comenzando a extenderse a capturas artesanales con destino al mercado de Buenos Aires, aunque sin una regulación pesquera oficial. Por lo tanto, el monitoreo de sustancias tóxicas es imprescindible para otorgar seguridad en el consumo del recurso. En la costa de Chubut, la toxina paralizante de moluscos (TPM) es producida por la floración del dinoflagelado Alexandrium tamarense siendo acumulada por moluscos durante su alimentación. El Código Alimentario Argentino, determina que los gasterópodos y bivalvos no pueden superar las 400 UR/100 g de pulpa húmeda para considerarse aptos para el consumo. El objetivo del presente trabajo es reportar las determinaciones de TPM sobre los gasterópodos submareales Odontocymbiola magellanica, Buccinanops cochlidium y Trophon geversianus, extraídos en un año de muestreo (septiembre 2010-agosto 2011) en playa Villarino dentro del golfo San José (42º24?10??S, 64º17?26??W), y las especies intermareales Nacella magellanica y Tegula patagonica extraídos mensualmente durante 2012 en Punta Ninfas (42º46?00?S, 65º02?00?W), una zona expuesta al mar abierto. La concentración de TPM se obtuvo por separado en pie y órganos de O. magellanica y B. cochlidium y en el cuerpo entero de T. geversianus, N. magellanica y T. patagonica mediante el método de bioensayo en ratón. Valores no aptos para consumo se presentaron en el pie de O. magellanica en febrero y junio (media= 446,25 ± 38,53 UR/100 g) y en sus órganos en enero y febrero (530 ± 28,28 UR/100 g) y sólo en los órganos de B. cochlidium en diciembre (480,5 UR/100 g). Las especies T. geversianus, N. magellanica y T. patagonica nunca superaron el límite máximo de consumo. Las diferencias registradas podrían deberse a los diferentes tipos de alimentación y al hábitat. Estas especies podrían plantearse como recurso alternativo durante los meses de veda de moluscos por TPM, aunque habría que realizar muestreos periódicos en cada sitio de captura de gasterópodos monitoreando su presencia.