INVESTIGADORES
PELLEGRINI Micaela
congresos y reuniones científicas
Título:
Archivar, conservar, mitificar y profanar... criterios de conservación que obstaculizan la tarea
Autor/es:
MICAELA PELLEGRINI MALPIEDI
Lugar:
Tandil
Reunión:
Jornada; IV Jornadas de Investigación y Reflexión sobre Historia, Mujeres y Archivos; 2018
Institución organizadora:
Red iberoamericana de investigacion en historia, mujeres y archivos
Resumen:
Lo que diferencia el oficio del historiador e historiadora al de otras disciplinas es su indiscutible necesidad de trabajar con las fuentes. Para historiar es imprescindible el manejo de evidencias que materialicen nuestro objeto de estudio. Éstas, que pueden presentarse en forma de epistolarios, fotografías, documentos legales, objetos, notas periodísticas, entrevistas orales, no siempre resultan seleccionadas, ordenadas y catalogadas. De hecho, una de las tareas más complejas, pero apasionante para muchos y muchas, resulta la búsqueda de esas huellas. Justamente, así lo definió Arlette Farge (1991) en su ensayo La atracción del archivo, con sus encantos y trampas. Ahora bien, las fuentes lejos de ser repositorios que conducen directamente a las notas del pasado, son incompletas, fragmentarias, escurridizas y muchas veces inaccesibles.Actualmente, estoy realizando una investigación inscripta en el recorridode la línea torcida que une la historia social con la historia cultural (Eley, 2008) para tratar problemas de educación, de sensibilidades y de mujeres en clave de género. Tal investigación tiene por objetivo historiar las prácticas pedagógicas de una maestra escolanovista de la ciudad de Rosario, ubicada en el período de entreguerras. Las variables de esta investigación se preguntan por las prescripciones acerca de los cuerpos, las sensibilidades y los géneros de quienes se formaban en dicha escuela pero, además, de quien enseñaba: Leticia Cossettini. En este marco, decidí reconstruir la vida de la maestra, ejercicio que resultó, en un principio, un problema fácil de resolver porque contaba con el Archivo Pedagógico Cossettini. Es decir, en la ciudad de Rosario, localidad donde ofició como docente Leticia, se encuentra su archivo: cajas repletas de fotografías, cuadernos, diarios de maestras, epistolarios, actas escolares descansan a pocos metros de mi lugar de trabajo. Sin embargo, este universo de huellas fue en principio un guiño ingenuo de lo que luego se convertiría en un objeto de estudio por sí mismo.A continuación, explicaré brevemente dos cuestiones: la primera se refierea las características de la construcción y la permanencia del Archivo Pedagógico Cossettini y la segunda, el proceso que tuve que atravesar como aprendizde historiadora para comprender que esos papeles, cuadernos, documentos yfotografías organizadas contenían una supuesta transparencia. El trabajo quecontinué fue deshacerla como tal.