Cobertura en el sudoeste bonaerense en suelos bajo siembra directa

LÓPEZ FM; DUVAL M; MARTINEZ, JM; GALANTINI, J

Bahía Blanca

Congreso; XXIV Congreso Argentino de la Ciencia del Suelo II Reunión Nacional Materia Orgánica y Sustancias Húmica; 2014

Asociación Argentina de la Ciencia del suelo

La expansión acelerada de la siembra directa (SD), que en pocos años ha llegado a superar el 70% de la superficie agrícolo-ganadera del país, hace que no se conozcan detalladamente sus efectos sobre las propiedades químicas, físicas y biológicas del suelo. El manejo bajo SD se asocia generalmente con altos niveles de residuos de cultivos en la superficie del suelo, lo que tiene efectos positivos sobre el control de la erosión, el contenido de materia orgánica, la fertilidad física y química y la biología del suelo. Se supone que hay un nivel umbral de cobertura por encima del cual el efecto sobre las propiedades del suelo no es significativo. Este nivel crítico debe ser establecido en cada sitio específico, según tipo de suelo y condiciones del medio ambiente. Según la FAO y otros autores, una cobertura de suelo inferior a 30% no se considera como agricultura de conservación. Con el fin de evaluar la situación de lotes de productores al momento de la siembra del trigo en el sudoeste bonaerense, se realizó un muestreo durante los años 2011, 2012 y 2013. Se procedió a muestrear los residuos en superficie y la cobertura del suelo en más de 130 lotes pertenecientes a la regional Bahía Blanca de AAPRESID. Como se observó una gran variación, tanto de presencia de residuos como de cobertura, se procedió a clasificar las muestras según antecesor. Así se obtuvieron dos subgrupos de muestras: uno con cultivo invernal como antecesor (trigo o cebada) y otro subgrupo con antecesor de cultivos estivales (soja o girasol). Los resultados muestran una predominancia de monocultivo de cereales bajo SD en los establecimientos muestreados. Se registraron valores de rastrojos desde 0 hasta 9614,3 kg ha-1 con porcentajes de cobertura de 2,6 a 95,6%. En cuanto a la relación entre residuos superficiales y cobertura del suelo, se procedió a separar según antecesor y se obtuvieron relaciones significativas para ambos subgrupos. Para lograr una cobertura del suelo de 30% con residuos de cereales se necesitarían unos 2000 kg ha-1 de rastrojos en superficie. En cuanto a los cultivos estivales, la relación entre presencia de residuos y porcentaje de cobertura resultó ser muy baja. Un aspecto a destacar es que aunque en promedio se observó una cobertura promedio del 39,9%, una gran proporción de lotes bajo SD en la región semiárida-subhúmeda del sudoeste bonaerense presenta una cobertura del suelo menor a la establecida por la bibliografía como necesaria para considerarla agricultura de conservación.