INVESTIGADORES
GARGANTINI Daniela Mariana
congresos y reuniones científicas
Título:
La articulación como estrategia pedagógica innovadora para la construcción de un nuevo perfil profesional del espacio construido- Experiencia de la cátedra Problemática socio-habitacional de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Católica de Córdob
Autor/es:
GARGANTINI, DANIELA; IPARRAGUIRRE, ELISA; BASSO, LAURA; GARBELLOTTO, LUDMILA; GREPPI, VERÓNICA; PIVETTA, LEANDRO; CUADRA, SOLEDAD; DE GOYCOECHEA, CARMEN; TARQUINO, ANDREA; PACCIERI, MARIANA
Lugar:
Montevideo
Reunión:
Encuentro; XVI Encuentro Internacional Red Universitaria Latinoamericana de Cátedras de Vivienda: Experiencias innovadoras en la formación académica de grado y posgrado en gestión para la producción social del hábitat; 2010
Institución organizadora:
Facultad de Arquitectura de la Universidad de la República
Resumen:
La realidad actual, no sólo a nivel socio-habitacional sino a nivel de formación superior, demanda nuevas estrategias de gestión y formación, exigiendo una revisión del perfil profesional de los especialistas en el espacio construido, trascendiendo el rol de meros expertos técnicos para incorporar capacidades propias de un actor o agente de desarrollo. Es decir con capacidad para articular análisis territoriales y arquitectónico-urbanos integrados y prospectivas innovadoras, con capacidades de comunicación, animación, mediación y búsqueda de sinergias entre actores, y con habilidades para el diseño técnico y la gestión institucional (BERVEJILLO, 1998) A la luz de estos desafíos, la experiencia presentada intentó generar un modelo de articulación, asociación e interacción no competitiva entre instituciones, grupos, disciplinas, escalas y personas (PERALTA- ZABLOSKY, 2006) Para ello se propuso que redes mayores de escala institucional (las universidades) se vinculen con micro-redes de escala tanto interna (conjuntos de cátedras por nivel y vinculación temática entre cátedras e institutos) como externa (referentes comunitarios y otros actores sociales externos). Parece apropiado para la comprensión del modelo propuesto la analogía del racimo o cluster, que permite la vinculación parcial de los nodos menores o terminales (las uvas) en un agrupación coherente y la conexión con el sistema mayor a partir de un nodo (o rama), que a su vez puede conectarnos en forma directa con el tronco. Si uno de estos nodos falla o fracasa (por discontinuidad del programa político o por desvinculación del personal docente o del alumno, por ejemplo), el sistema de red permite la reconexión del cluster por otro nodo. De esta manera, se pretende superar el posible aislamiento de una pieza, como en la práctica sucede hoy con muchas iniciativas académicas o de transferencia al medio, que pierden capacidad de gestión o de convocatoria por alejamiento de un miembro clave, por desvinculación temporal o por intermitencias en la provisión de recursos por parte de alguno de los actores involucrados. El conjunto de instituciones, actores, escalas y disciplinas articuladas pueden así actuar en forma solidaria, complementando la debilidad de las individualidades. Bajo este enfoque se enfatiza la importancia de todos los elementos independientemente de la escala y la capacidad de gestión propia (todas son uvas) Es importante rescatar estos sistemas de vínculos por su carácter efímero y no invasivo, ya que no son modificadas las condiciones administrativas preexistentes, y por consiguiente no pone en riesgo el programa o la misión institucional propia, ni se afecta la burocracia de cada una de las instituciones y/o actores involucrados. Es rescatable también el hecho de que este tipo de estrategia pedagógica requiere pequeñas escalas de inversión, ya que utilizan –en la mayoría de los casos– recursos humanos existentes (planteles de personal administrativo, equipos de cátedras, grupos de docentes-investigadores, etc.) sin poner en riesgo la autonomía de cada uno de ellos (cada cátedra, instituto, grupo voluntario, u otro actor mantiene la autonomía de decisiones en cuanto a criterios de incorporación de miembros o sistemas y parámetros de evaluación interna) Unido a ello el modelo de formación académico articulado y asociativo no supone la generación de un nivel administrativo superior o de mayor jerarquía: la coordinación realizada en forma horizontal hace innecesaria la creación de entes reguladores u organismos complejos que requieren una estructura burocrática y consumen recursos económicos, permitiendo el ejercicio democrático desde los ámbitos de educación superior. Además, son generados nuevos vínculos institucionales, favoreciendo la promoción de miembros de las cátedras, la incorporación de nuevos interesados en iniciar la carrera docente y el desarrollo de futuros trabajos finales de carrera. De esta manera y a pesar de que todavía existen dificultades y obstáculos en los ámbitos universitarios para el pleno desarrollo de este tipo de estrategias, hasta el momento las mismas parecen ser herramientas útiles para la construcción progresiva de un nuevo perfil profesional. .