INVESTIGADORES
DIODATO Soledad Lorena
congresos y reuniones científicas
Título:
Caracterización biogeoquímica de algunos cursos de agua emisores de aportes urbanos al sistema de bahías de la ciudad de Ushuaia, Canal Beagle.
Autor/es:
DIODATO, S.L.; NOHRA, Y; CAMILIÓN, C.; AMIN, O.; COMOGLIO, L. I.
Lugar:
Bahía Blanca
Reunión:
Encuentro; II Reunión Argentina de Geoquímica de la Superficie (RAGSU); 2012
Institución organizadora:
UNS- IADO
Resumen:
La ciudad de Ushuaia, ubicada en la Provincia de Tierra del Fuego- Argentina se emplaza sobre un sistema costero comprendido por las Bahías Ushuaia, Encerrada y Golondrina. En la línea de costa recibe descargas de compuestos provenientes de diversas fuentes emisoras a través de cursos de agua que atraviesan la zona urbana de la ciudad. Un estudio de la biogeoquímica de los Arroyos Buena Esperanza, Grande y Rodríguez, de un turbal urbano, y de dos descargas pluvio-cloacales fue realizado entre los meses de octubre 2009 y febrero 2011 de manera bimestral con el objetivo de identificar a través de la evaluación de parámetros físico-químicos y microbiológicos los principales sitios de aporte de esas sustancias al sistema. Los parámetros incluidos fueron temperatura, oxígeno disuelto, salinidad, pH, conductividad, turbidez, nitratos, nitritos, amonio, fosfatos, silicatos, materia orgánica particulada, sólidos totales en suspensión y bacterias coliformes totales y fecales. Las 15 variables estudiadas presentaron una clara diferenciación entre los sitios. Tanto el análisis factorial como el Índice de Calidad de Agua (ICA) indicaron que las desembocaduras de los Arroyos Buena Esperanza y Rodríguez, el Turbal y el entubamiento sobre Bahía Golondrina presentan un alto impacto antrópico evidenciado por la presencia de altas concentraciones de nutrientes de N y P y de materia orgánica, junto con una baja saturación de oxígeno disuelto (ICA entre 40 y 50; aguas de mala calidad); a diferencia de los sitios ubicados en las zonas más altas de la ciudad que presentan un bajo impacto antrópico (ICA entre 53 y 87; aguas de media y buena calidad). Por lo expuesto anteriormente, resulta necesario establecer un plan de saneamiento y monitoreo sostenido en el tiempo.