INVESTIGADORES
MILLENAAR Veronica
congresos y reuniones científicas
Título:
Trayectorias, sentidos del trabajo y códigos de género de jóvenes varones en la Formación Profesional
Autor/es:
MILLENAAR, VERÓNICA
Reunión:
Congreso; IX Congreso de Estudios del Trabajo; 2019
Institución organizadora:
ALAST
Resumen:
La ponencia propone una revisita a los resultados de una tesis doctoral,con el objetivo de analizar trayectorias educativo-laborales de varones jóvenes para reconocer el papel que en dichas trayectorias juegan las instancias educativas de formación para el trabajo. La Formación Profesional (FP) es uno de los niveles educativos que se orienta a la transmisión de saberes socio-laborales, y que a lo largo de su historia ha tenido un papel relevante en la formación y cualificación de los y las trabajadores/as. Se ha planteado que, históricamente, su oferta ha reflejado, casi sin cuestionamientos, la división sexual del trabajo. Desde este marco, el hecho de elegir mostrar particularmente las masculinidades busca responder a cierta ausencia del análisis de las experiencias de los varones en los estudios de género; y particularmente referidos a su formación en Centros de FP. La literatura sobre el tema plantea que en la formación de trabajadores masculinos se despliegan códigos de género vinculados al ideal de la superioridad, la fuerza, la provisión, la protección. En el caso de los varones, las modificaciones actitudinales y el reforzamiento de las identidades de género experimentadas a lo largo de la instancia formativa se orientan hacia la consolidación de las normas de la virilidad. Esto es: la habituación de los cuerpos al esfuerzo físico, el acostumbramiento al trato rudo entre compañeros y con los superiores, la disposición a desafiar el peligro, la negación del miedo, y el menosprecio a todo lo considerado femenino. Por su parte, se muestra que aquellos varones que eligen formarse en empleos que no son típicamente masculinos padecen la desestimación social por su incumplimiento con el rol de proveedores. No obstante, en el actual contexto de precariedad laboral, los jóvenes varones se acercan a los cursos con intereses diversos, compartiendo representaciones de sí como varones, trabajadores y jóvenes que, en ocasiones, distan de aquel ideal patriarcal; pero respecto del cual, inevitablemente, deben entablar algún tipo de relación (resistiéndolo, impugnándolo o adhiriendo a él). Metodológicamente, la investigación tuvo un abordaje cualitativo, con un trabajo de campo extenso en el cual se reconstruyeron trayectorias de jóvenes egresados/as de tres centros de FP ubicados en la Ciudad de Buenos Aires y el conurbano norte y noroeste de la provincia de Buenos Aires, durante los años 2008 y 2013. Particularmente, esta ponencia se basa en 30 entrevistas en profundidad a varones de entre 18 y 32 años de edad. Cabe señalar que todos los jóvenes analizados son egresados de cursos de FP en diferentes especialidades (carpintería, soldadura, ventas, gastronomía, mecánica de motos), en centros que, en su mayoría, reciben población de sectores populares.La ponencia muestra diferentes masculinidades, así como la construcción de múltiples sentidos de la FP entre los jóvenes con el horizonte puesto en complejizar el rol de dichas instituciones como dispositivos de socialización ocupacional y de género. En función del análisis de datos efectuado, se presentan ?grupos de trayectorias? de varones que se diferencian en relación a sus discursos en torno a sus expectativas de formación, sentidos del trabajo e imágenes de sí mismos como varones y trabajadores. En un primer grupo, el trabajo es la esfera que adquiere centralidad en sus trayectorias y, por lo tanto, en sus discursos, es la profesionalización en el oficio el proyecto que se prioriza. La expectativa de profesionalizarse en el oficio se vincula al discurso tradicional compartido en torno al rol del varón como trabajador proveedor y protector de sus familias. El sentido dado a los cursos, además de ser la vía para responsabilizarse en relación con su identidad laboral, también los afirma en términos de su masculinidad. En un segundo grupo, las redes de sociabilidad barrial adquieren relevancia en los sentidos dados a la formación, y se vinculan a la representación que tienen de sí mismos como jóvenes varones y trabajadores. En estos varones, el mandato de género masculino vinculado al rol de proveedor sigue operando como un ideal en el imaginario. Sin embargo, las oportunidades reales de empleo impiden llevarlo a la práctica, al mismo tiempo en que, a diferencia del primer grupo, entre estos jóvenes se manifiestan mayores resistencias a aceptar trabajos en los cuales se padece desgaste físico e insalubridad. Así es que la afirmación de la masculinidad se produce a partir de las redes de sociabilidad barrial, que en ocasiones llevan a los jóvenes a involucrarse en prácticas desprestigiadas socialmente. Cuando se acercan a los centros de formación, los jóvenes de este grupo buscan una re-vinculación con instituciones socialmente legitimadas. En un tercer grupo, el estudio adquiere centralidad, y por ello, las expectativas de formación y los sentidos del trabajo se vinculan al esfuerzo más general de continuar estudios superiores. Así, se observa que la formación se percibe más instrumentalmente y en un sentido de acumulación de acreditaciones y aprendizajes para solventarse mejor el recorrido educativo que se anhela. Los mandatos de género son cuestionados y resistidos; aspecto que se vuelve por momentos un obstáculo para legitimar la propia virilidad en los grupos de pares menos afines a sus inquietudes.A partir de los hallazgos, la ponencia apunta a discutir qué códigos de género circulan en la FP, reconociendo la heterogeneidad de experiencias biográficas y subjetivas de quienes llegan a esas aulas. Así, el análisis realizado lleva a plantear que urge desnaturalizar, en dicho nivel, la reproducción de las desigualdades de género, pero no únicamente con el público femenino sino también con el masculino; cuestión que todavía aún hoy no se prioriza entre las agendas de género.