INVESTIGADORES
FINQUELIEVICH Susana
capítulos de libros
Título:
E-inclusión en Argentina: el acceso público a la información y las TIC
Autor/es:
SUSANA FINQUELIEVICH; ALEJANDRO PRINCE; ADRIAN ROZENGARDT
Libro:
Los Residuos electrónicos en la Sociedad del Conocimiento en América Latina y el Caribe
Editorial:
UNESCO
Referencias:
Lugar: Santiago de Chile; Año: 2010;
Resumen:
La población argentina es fuertemente permeable a las innovaciones tecnológicas en materia de información y comunicación (TIC). Según lo señalan numerosas investigaciones y estudios[1], los ciudadanos otorgan un gran valor a la posibilidad de acceder a la información y la comunicación a través de las TIC, y se aprecia en alto grado la incorporación de la tecnología a la vida cotidiana, como lo testimonia el incremento del parque de computadoras, el aumento del uso de la banda ancha y la cantidad de líneas activas de telefonía celular. Un número cada vez mayor de personas de todas las edades y todos los orígenes y condiciones sociales  -con acento en las capas medias y altas -  utilizan o se interesan por los beneficios de las TIC. Según las ultimas estimaciones de la consultora Prince & Cooke a diciembre de 2009, más de 23 millones de argentinos (aproximadamente el 57 % población) es usuario frecuente de Internet, principalmente desde conexiones pagas en sus hogares, desde sus trabajos, o desde cibercafés o lugares de acceso privados, esta medida de uso y penetración de Internet es la mas alta en la región de América Latina y el Caribe (en adelante LAC). El perfil de los usuarios de Internet ha cambiado en los últimos años. Ya no está anclado en los niveles de elite, con estudios universitarios, con conocimientos de informática, ingresos elevados y en su mayoría de sexo masculino, como en las primeras épocas (alrededor del año 1995). Los cambios más visibles son, entre otros, la mayor penetración en niveles medios y bajos, que comenzaron a utilizar Internet después de 2001, la ampliación del nivel educativo, que incluye a muchos de los que no han terminado la primaria y la secundaria. El equilibrio entre los géneros es cercano al 50%, y las edades de ingreso se han ampliado por debajo de los 18 años y se han extendido a los adultos mayores. La media de edad, que se mantiene desde 2003, es de unos 29 años. Se ha producido también la entrada de usuarios con bajos conocimientos tecnológicos, debido al uso de los cibercafés, locutorios, bibliotecas públicas, y otros formatos de acceso público a la información. En la última década la rápida difusión de los cibercafés, locutorios y cabinas de cooperativas han sido uno de los aspectos destacados que explican el fuerte incremento del acceso público a la información. El papel de la banda ancha es relevante; se cuentan más de 2 millones de suscripciones (3 años atrás, sólo había 475.000). No obstante serían necesarias grandes inversiones y recursos humanos especializados para sostener el 20% de crecimiento anual. De acuerdo con un estudio de Prince & Cooke (2007), hay actualmente 160,000 personas en las empresas TIC. Pero si se suman las personas que trabajan para otros sectores, tanto públicos como privados, que usan las herramientas TIC, su número llega a 310.000 (casi el 2% de la PEA). Para el año 2009, en el sector se prevé la necesidad de contar con alrededor de 370,000 personas. Los locutorios, ciber y las cabinas de las cooperativas se han transformado en un destacado canalizador de las necesidades de acceder a la información y las TIC por parte de la población. Un conjunto de cerca 18.500 locales conforman este segmento del mercado, con valores accesibles a todos los sectores sociales. Ubicados en las ciudades se conforman como unidades económicas pequeñas, inestables y de gran movilidad. En este trabajo se ofrecen algunos de los resultados de la radiografía del acceso público a la información y las TIC en Argentina emprendidas en el marco de la investigación “Public Access to Information and Communication Venues” de la University of Washington, Center for Information & Society[1] realizada por Finquelievich y Rozengardt, y de los estudios de la empresa Prince & Cooke (2008-2009). [1] Ver http://www.cis.washington.edu/research/updates/landscape-study/ [1] Encuesta Gallup 2008, entre otras.