INVESTIGADORES
LANTOS Irene Johanna
congresos y reuniones científicas
Título:
Detección de distintas comidas y bebidas en la cerámica incaica de Fuerte Quemado-Intihuatana combinando cromatografía gaseosa-espectrometría de masa (GC-MS) y espectrometría de masa de relaciones isotópicas (EA-IRMS).
Autor/es:
IRENE LANTOS; MARTÍN ORGAZ; NÉSTOR KRISKAUTSKY; HÉCTOR PANARELLO
Lugar:
San Miguel de Tucumán
Reunión:
Congreso; XIX Congreso Nacional de Arqueología Argentina.; 2016
Institución organizadora:
Facultad de Ciencias Naturales e Instituto Miguel Lillo, Universidad Nacional de Tucumán
Resumen:
En este trabajo presentamos los resultados de los análisis de residuosorgánicos recuperados en contenedores cerámicos incaicos del sitio FuerteQuemado-Intihuatana, situado en la Provincia de Catamarca, Argentina. Losrecipientes fueron recuperados de los sectores IV (Inca) y V (local) (Kriscautzky1999; Orgaz 2014). Los mismos forman parte de un conjunto especializadopara la preparación y almacenamiento de comidas y bebidas alcohólicasen contextos de comensalidad festiva, que incluye los tipos morfológicos aríbalo,aribaloide, puco, tinaja y olla de base aguzada. En un estudio inicial y deacuerdo al comportamiento de las variables de manufactura (forma, tamaño,tratamiento de super?cie, presencia de decoración) y rastros de uso (presenciade tizne, huellas de atrición mecánica y no mecánica), se establecieronlas funciones que habrían tenido las piezas cerámicas que aquí se analizan.El aríbalo y los aribaloides habrían sido para almacenar líquidos al igual quela urna, mientras que la olla de base aguzada habría sido empleada en actividadesrelacionadas a la preparación de comidas y/o almacenaje de bebidaspara la fermentación, y los pucos habrían servido como contenedores paraservir alimentos o bebidas (Orgaz 2008). Sin embargo, la aproximación morfo-tecno-funcional no permitió conocer qué fue lo que se preparó, consumióy almacenó en cada recipiente.Es por eso que se decidió aplicar una metodología arqueométricacombinando técnicas para determinar el origen de los residuos orgánicosde los alimentos preparados y consumidos en el sitio. Se efectuaron extraccionesquímicas de los lípidos extraordinariamente bien preservados en lasmatrices cerámicas, posteriormente se realizaron distintas derivatizacionesquímicas y se analizaron los componentes de ácidos grasos y compuestosneutros (esteroles y alcoholes de cadena larga) por cromatografía gaseosa-espectrometría de masa (GC-MS). En paralelo, se analizó la composiciónisotópica ?bulk? del carbono en los lípidos extraídos por análisis elemental-espectrometría de masa de relaciones isotópicas (EA-IRMS). Los análisisarrojaron resultados complementarios y permitieron determinar el origen delas comidas y bebidas alcohólicas contenidas en cada recipiente.Los resultados indicaron que se usó grasa de camélidos para la impermeabilizaciónde los contenedores dedicados a contener bebidas tales comoel aríbalo, los aribaloides y la tinaja (urna) (Otero 2006; Lantos et al. 2015). Seobservó que en estos recipientes predominó la bebida aloja realizada a basede algarroba con respecto a la chicha de maíz. En este sentido, se conoce queel consumo de aloja fue una práctica muy extendida en Catamarca desdetiempos prehispánicos y está bien documentada hasta el período de contactoen los registros etnohistóricos y actuales (Carrizo 1942; Gentile 2001; Karlovich2005). Orgaz (2012) plantea una coexistencia de las prácticas ritualeslocales de raíz preincaica y aquellas incorporadas bajo el Estado y potenciadasa través de los banquetes públicos, donde la persistencia de los procesoslocales de fermentación, como es la elaboración y posterior consumo dealoja, fue el vehículo a través del cual se sellaron compromisos y alianzas quehabrían conducido a una situación de estabilidad política en la región, perono por ello carente de tensiones. Para apoyar esta hipótesis se cuenta conlos resultados de estudios previos de conjuntos cerámicos incaicos de otrossitios catamarqueños (San Francisco, Las Coladas, Mishma 7, Batungasta y ElShincal) que también indicaron un consumo mixto de chicha y aloja (Lantos2015; Lantos et al. 2015; Orgaz et al. 2015).Por otra parte, los resultados de los estudios químicos e isotópicosrealizados sobre la olla de base aguzada indicaron la presencia de grasas animalesy aceites vegetales con un fuerte componente de plantas C4. Es muyposible que en este recipiente se haya procesado maíz, ya sea fermentándoloo cociéndolo. A su vez, los pucos también presentaron per?les complejosde ácidos grasos que indicaron mezclas de grasas animales y aceites vegetalescompatibles con usos multifuncionales, tal como el consumo de guisos ybebidas.Finalmente, en este trabajo se demuestra cómo las técnicas arqueométricascombinadas GC-MS y EA-IRMS permitieron aproximarnos a los usos de los contenedores cerámicos incaicos catamarqueños.