“¿Ciudadanos o políticos?: Las disyuntivas morales de los jóvenes argentinos en el post-2001”

MIRIAM KRIGER

Buenos Aires

Jornada; Reunión Regional del Grupo de Trabajo de CLACSO “Juventud y nuevas prácticas políticas en América Latina”; 2008

CLACSO

<!-- /* Style Definitions */ p.MsoNormal, li.MsoNormal, div.MsoNormal {mso-style-parent:""; margin:0cm; margin-bottom:.0001pt; mso-pagination:widow-orphan; font-size:12.0pt; font-family:"Times New Roman"; mso-fareast-font-family:"Times New Roman";} @page Section1 {size:612.0pt 792.0pt; margin:70.85pt 3.0cm 70.85pt 3.0cm; mso-header-margin:36.0pt; mso-footer-margin:36.0pt; mso-paper-source:0;} div.Section1 {page:Section1;} -->   Se presentan en esta ponencia hallazgos parciales de la investigación de mi Tesis doctoral (FLACSO-2007), que estudia  la relación entre Identidad, Historia y proyecto de la nación en las representaciones de los jóvenes argentinos en el contexto posterior al 2001.   Se ha realizado para ello un estudio cuantitativo sobre una muestra de 364 alumnos del Ciclo Básico Común de la Universidad de Buenos Aires (2005), y luego un estudio cualitativo sobre un grupo selecto de la misma muestra. Presentaré resultados que pueden ser un aporte a la comprensión  de las representaciones actuales de jóvenes sobre la política , y en particular al distanciamiento hallado en mi investigación entre “ciudadanía” y “política”, percibidas por  los participantes como dos planos diferentes y antagónicos de ejecución de agencia social: el  primero,  muy ligado al ejercicio individual y formal de la ciudadanía,  y el segundo crecientemente restringido al poder instituido y a la “alta política”, y a supuestos usos interesados e ilícito del mismo. Analizaré los principales obstáculos detectados para acceder a la política, en particular en relación con una gestión social predominantemente contrahistórica de la memoria de la dictadura  y con la  interpretación de la crisis del 2001  en clave  moral, en que se funda   la postulación  de una ciudadanía “social” no política (y con tendencia anti-política), que aparece como garante (moral) de la reconstrucción democrática.