INVESTIGADORES
RESETT Santiago Alejandro
congresos y reuniones científicas
Título:
Acoso escolar (bullying) y sus efectos psicosociales en niños y adolescentes
Autor/es:
SANTIAGO RESETT; JOSE EDUARDO MORENO
Lugar:
Tucumán
Reunión:
Jornada; XV Reunión de la Asociación Argentina de Ciencias del Comportamiento; 2015
Institución organizadora:
AACC Asociación Argentina de Ciencias del Comportamiento
Resumen:
El bullying o acoso escolar es una problemática extendida en casi todos los países desarrollado o en vías de desarrollo, como indican estudios internacionales recientes. Desde hace tiempo se sabe que el bullying es un importante factor de riesgo para la salud mental de los niños y adolescentes, siendo una de las mayores fuentes de estrés a la que están expuestos los niños y jóvenes. Por ejemplo, es una de las mayores razones por la cual los alumnos no quieren ir a la escuela o dejan los estudios. Incluso, trabajos recientes indican que el ser acosado en la niñez y en la adolescencia puede tener efectos más negativos cuando adultos que el maltrato parental. La literatura científica demuestra que el ser agredido o/y ser agresor se asocian con importantes efectos para la salud mental, tanto concurrentes como a largo plazo. De este modo, está bien establecido que las víctimas tienen mayores problemas emocionales, tienen dificultad para hacer amigos y son menos habilidosos socialmente. Los agresores, en cambio, no tienen mayores problemas emocionales o una imagen de sí negativa, pero presentan un patrón de problemas de conducta, bajas habilidades sociales y problemas en la cognición social. Unos de los peores efectos de la victimización crónica es el suicido o las masacres escolares, como el caso Junior en Carmen de Patagones. Así, el ser agresor en la adolescencia es uno de los mejores predictores de la conducta criminal futura en la adultez y se sabe que muchos de los agresores luego tienen problemas con la ley. El grupo de agresores/víctimas -grupo minoritario que agrede y es agredido- son quienes sistemáticamente ostentan el peor perfil psicosocial debido a la variedad de problemas que experimentan como a su intensidad. A pesar de la relevancia y preocupación que la temática ha cobrado en nuestro medio, en la Argentina la mayoría de los estudios a este respecto son de naturaleza teórica. Además, en raras ocasiones emplean instrumentos de sólidas propiedades psicométricas, lo cual es crucial para evaluar la gravedad del fenómeno y compararlo con los resultados de las investigaciones extranjeras. Asimismo, los pocos estudios disponibles en nuestro país sugieren que la violencia en las escuelas no sólo persiste, sino que cada vez emergen casos de violencia más graves. Una importante investigación de la UNESCO halló que la Argentina presenta el más alto nivel de acoso escolar en Latinoamérica. De este modo, los trabajos que integran el presente simposio estudiaron en dos regiones de la Argentina ?Paraná y la Ciudad de Mendoza- tanto el ser agredido como el agredir, con instrumentos de sólidas bondades psicométricas y con distintas técnicas de recolección, como el Autoinforme de Agresores/Víctimas de Olweus o las Nominaciones para Pares de Juvonen y otros. Además, la mayoría de ellos exploraron distintos los correlatos psicosociales del ser victimizado y agredir en adolescentes. Es sabido que la adolescencia es una etapa de transición con importantes cambios físicos, sociales y cognitivos en la cual pueden incrementarse las conductas de riesgo. El primer trabajo titulado Bullying y calidad de la amistad en la niñez escolar investigó cómo el ser agredido y agredir se asocian con una percepción de relaciones de amistad más negativas en ambos grupos, principalmente debido a altos niveles de conflicto y bajos niveles de ayuda percibida en dicho lazo. El trabajo segundo titulado El fenómeno bullying en adolescentes mendocinos, a partir de una muestra de gran tamaño, evaluó los niveles de ser agredido y agredir en adolescentes y las percepciones del accionar de la comunidad escolar ante el acoso, hallando niveles importantes de victimización como de agresión; además, de la percepción por parte de los adolescentes de una pobre actitud de la comunidad educativa para detenerlo. La tercera ponencia titulada Agresores, víctimas, agresores/víctimas y autoconcepto en adolescentes halló que las víctimas y los agresores tienen una peor autopercepción ?aunque los agresores se evalúan mejor en algunos dominios- pero quienes tienen el peor perfil en las autopercepciones eran los grupos de ambas condiciones. Finalmente, el cuarto trabajo llamado Victimización y agresión con nominaciones de pares y ajuste psicosocial demostró que en la adolescencia las víctimas presentan mayores niveles de problemas emocionales, los agresores mayores problemas de conducta, pero el grupo con el peor ajuste psicosocial eran los agredidos/agresores, debido a que puntuaban más alto que los grupos restantes en ambos tipos de problemas. De este modo, los presentes trabajos ponen de manifiesto cómo el ser agredido y ser agresor son importantes factores de riesgo en distintos aspectos del ajuste psicosocial (relaciones de amistad, autoconcepto y problemas emocionales y de conducta) y señalan una incidencia no menor del ser agredido como agredir. Finalmente, los organizadores del simposio analizarán brevemente las implicancias de los trabajos: por qué el ser victimizado y el agredir es un relevante factor de riesgo; por qué los grupos agresores/víctimas presentan el peor ajuste en la mayoría de las ponencias aquí presentadas; las ventajas y desventajas de las técnicas de recolección de datos usadas (autoinforme versus nominaciones de pares) y los aportes de las ponencias para futuras intervenciones. Luego se abrirá un espacio para las preguntas del público.