CIAP   27384
CENTRO DE INVESTIGACIONES EN ARTE Y PATRIMONIO
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
Poesías y xilografías: intercambios trasandinos entre Edgardo-Antonio Vigo y Guillermo Deisler
Autor/es:
DOLINKO, SILVIA
Lugar:
Ciudad Autónoma de Buenos Aires
Reunión:
Jornada; I Jornadas del CIAP Arte y Patrimonio. Historia, materialidades, prácticas y discursos; 2020
Institución organizadora:
Centro de Investigaciones en Arte y Patrimonio (CIAP)
Resumen:
Edgardo-Antonio Vigo y Guillermo Deisler mantuvieron una intensa relación profesional y amistosa desde 1966, y hasta el fallecimiento del artista chileno en 1995. Es bien conocido el rol de ambos artistas en la consolidación de la trama de arte correo internacional a partir de los años setenta, tal vez la faceta más difundida y celebrada de su producción. La circulación de sus planchas de estampillas, postales, sobres y sellos posibilitó a la vez que la propuesta artecorreísta tuviera amplio alcance entre otros artistas contemporáneos de la Argentina, de Chile y del mundo.Mientras que Vigo iniciaba sus estrategias de comunicación a distancia ?denominación sostenida por el artista argentino, en lugar de ?arte correo?- apostaba asimismo a la inmediatez de la circulación de la xilografía. En este sentido, planteo como hipótesis que el inicio de las relaciones entre Vigo y Deisler, y el motor o impulso para su proyecto de crear una red de circulación e intercambios internacionales, partió de uno de los recursos sobre el que ambos artistas profundizaron a lo largo de la década del sesenta: la multicirculación del grabado en madera. Así, la presencia de Deisler en el Museo de la Xilografía de La Plata, emprendimiento que Vigo sostuvo desde fines de los años sesenta, constituye un caso significativo en lo que respecta a su aspiración por un acceso amplio y desacralizado a la obra de arte. El patrimonio de este museo circulante albergado en cajas-valija con ecos duchampianos fue constituyéndose a partir de donaciones o canje de estampas propias y de otros artistas; sin espacio fijo ni formal, la condición de ubicuidad del museo posibilitaba que fuera exhibido en espacios culturales, instalado en escuelas, clubes u otros ámbitos de sociabilidad comunitaria, como así también en casas particulares. De este modo, el museo-valija transportaba estampas originales y múltiples que resultaban buenos ejemplos de lo que, por esos tiempos, Vigo proponía como un ?arte tocable?.Difundidas a través de sus publicaciones y emprendimientos culturales, las obras gráficas de Deisler y de Vigo se situaron entonces entre la comunicación a distancia y lo palpable de la materialidad de la estampa, constituyéndose en vehículo para la construcción y consolidación de la relación entre ambos artistas, pero también para la conformación de redes de circulación transcordilleranas.