La simulación imaginada y concreta de modelos de situación favorece la transferencia en solución de problemas de álgebra con enunciado

RICARDO MINERVINO; MAXIMO TRENCH; FERNANDO ADROVER

San Carlos de Bariloche

Simposio; "Nuevas alfabetizaciones en el siglo XXI"; 2008

Universidad Autónoma de Madrid

Una de las cuestiones que han preocupado a la psicología de la instrucción es el problema de la transferencia, esto es, la dificultad que encuentran los alumnos para aplicar lo que han aprendido en la escuela a situaciones diferentes de las originales (cf., Barnett & Ceci, 2002). Estudios realizados por Reed y cols. sobre solución de problemas algebraicos han mostrado que los estudiantes universitarios encuentran serias dificultades para resolver problemas que requieran introducir adaptaciones en la ecuaciones aprendidas. En general, las mejoras instructivas dirigidas a superar estas dificultades mediante la provisión explícita de reglas especeificas no han alcanzado las ventajas transferenciales esperadas (cf., Reed, 1993). Nathan, Kintsch y Young (1992) proponen que la tarea de resolver un problema de álgebra con enunciado supone a) extraer las proposiciones contenidas en el texto, b) elaborar un modelo de situación cualitativo de la situación descrita en el texto y c) derivar una ecuación mediante la elaboración de un modelo formal que vincule una serie de subesquemas ecuacionales al modelo de situación cualitativo. Uno de los problemas que encuentran los estudiantes para resolver problemas de álgebra con enunciado radica en que no apoyan las ecuaciones en los modelos de situación a los que esas ecuaciones se refieren (Greeno, 1989; Hall et al., 1989). Teniendo en cuenta estos hallazgos, diversos autores han desarrollado entornos de aprendizaje destinados a promover que los estudiantes asienten la comprensión y manipulación de sus esquemas y procedimientos algebraicos en imágenes dinámicas de las situaciones descriptas en los problemas (e.g., Nathan et al., 1992; Reed, 2005). No se ha puesto a prueba, sin embargo, una aplicación de este enfoque para mejorar la transferencia. Desarrollamos un experimento que tuvo como primer objetivo determinar si un proceso transferencial apoyado en simulaciones dinámicas favorece la adaptación de una solución aprendida a problemas que exigen introducir variaciones a dicha ecuación. El segundo objetivo consistió en comparar la eficacia de simulaciones basadas en imágenes internas con la de aquellas basadas en la manipulación de objetos concretos. En base a evidencias sobre la eficacia de ambas actividades para generar inferencias (e.g., Glenberg, Gutierrez, Levin, Japuntich y Kaschak (2004), se predijo que las ventajas transferenciales de ambas resultarían equiparables. El tercer objetivo de nuestro estudio fue examinar si la eficacia de estas simulaciones depende del tipo de variaciones que introducen los problemas meta. Hipotetizamos que la estimulación para simular modelos situacionales resulta más efectiva cuando las variaciones implican mayor dificultad de incorporación ecuacional. Sesenta estudiantes de bachillerato fueron distribuidos al azar en tres grupos. Tras recibir instrucción sobre la resolución de un problema de álgebra con enunciado, todos recibieron cuatro problemas que diferían en el grado de complejidad que implicaba la adaptación exitosa de la ecuación original. Los dos grupos experimentales fueron estimulados a apoyar en modelos situacionales tanto su comprensión de la solución base como su comprensión de los problemas meta. Mientras que en el primero los participantes realizaron simulaciones imaginadas de los modelos de situación, en el segundo recibieron materiales concretos para realizar físicamente estas simulaciones (el Grupo de Control recibió instrucciones que no promovían un apoyo situacional). Los resultados mostraron que: 1) las condiciones de simulación imaginada y de simulación concreta resultaron más efectivas para promover la transferencia que la condición de control, 2) la simulación concreta no fue superior a la simulación imaginada en cuanto a favorecer la transferencia, y 3) ambos tipos de simulación tuvieron mejores efectos transferenciales en los problemas con variaciones que oponían mayores dificultades de asimilación ecuacional. Se discuten las implicaciones de los resultados obtenidos con respecto al diseño de entornos de aprendizaje, y con respecto al problema educativo general de la transferencia.