INEO   27310
INSTITUTO DE FILOSOFIA "EZEQUIEL DE OLASO"
Unidad Ejecutora - UE
libros
Título:
Belleza sin aura. Surrealismo y teoría del arte en Walter Benjamin
Autor/es:
IBARLUCÍA, RICARDO
Editorial:
Miño y Dávila
Referencias:
Lugar: Buenos Aires-Barcelona; Año: 2020 p. 446
ISSN:
978-84-18095-22-1
Resumen:
La "explotación filosófica" de las concepciones del surrealismo, el intento de llevar adelante una "crítica dialéctica" y una "superación" de su experiencia histórica, trasciende las observaciones de "Traumkitsch" (1927) y "Der Sürrealismus" (1929), los dos ensayos que Walter Benjamin dedicó expresamente al movimiento. Su interés por el surrealismo no se circunscribe a las obras mencionadas en estos dos ensayos, ni se limita a la fase inicial de Passagenarbeit, como una simpatía pasajera por Le paysan de Paris (1926) de Louis Aragon; comprende otras producciones y debates en el campo de la literatura y el arte que recorren las décadas de 1920 y 1930. Las reflexiones sobre las producciones de los surrealistas y sus compañeros de ruta, así como sobre aquellos objetos y prácticas que recibieron su atención en los ámbitos no sólo de la literatura y la pintura, sino especialmente en los de la fotografía y el cine, conducen a la elaboración de lo que Benjamin definió como una "teoría materialista del arte" (Carta a M. Horkheimer, 1935). Esta materialistische Kunsttheorie fue presentada básicamente en "Paris, die Hauptstadt des XIX. Jahrhunderts? (1935) y "Das Kunstwerk im Zeitalter seiner technischen Reproduzierbarkeit" (1935-36), cuya continuidad programática se pone de manifiesto a la luz delas consideraciones de Benjamin sobre la Erfahrung surrealista. El problema de la destrucción del aura de la obra de arte "que Benjamin intuye en su primera aproximación a la poesía surrealista y ocupa el centro de su materialistische Kunsttheorie" es indisociable del de la creciente estetización del mundo social y la refuncionalización del arte en la era del capitalismo, lo cual se pone de manifiesto en los dos extremos de reconceptualización de la experiencia estética: la arquitectura del siglo XIX y el advenimiento del cine. El fin del arte no es sino la superación del régimen aurático, su liberación del "valor cultual" que le presta su fundamento, esto es, el fin del arte autónomo, o más precisamente, de la época de la autonomía estética que sustrae el arte de la praxis humana, atribuyéndole fines y valores propios, que son tomados como distintos de los que caracterizan la vida o los objetos ordinarios, las prácticas sociales y los saberes prosaicos. La auténtica "politización del arte" consiste en la emancipación del arte del régimen de la apariencia y su institucionalización como una esfera separada de la vida para dar lugar a una profundización de la apercepción y la ampliación del espacio de juego, esto es, de interacción entre los seres humanos y los medios técnicos de la sociedad de masas.