INVESTIGADORES
DIEZ Jose Ignacio Manuel
capítulos de libros
Título:
Prólogo
Autor/es:
DIEZ, JOSÉ IGNACIO, GUTIÉRREZ, RICARDO RAÚL
Libro:
Cooperación, Innovación y Territorio. Estudios del Sudoeste Bonaerense
Editorial:
EdiUNS
Referencias:
Lugar: Bahía Blanca; Año: 2014; p. 7 - 14
Resumen:
En inicios del tercer milenio, las profundas transformaciones productivas, tecnológicas e institucionales registradas a escala global, han producido cambios significativos en la geografía de las actividades económicas. En América Latina, se evidencian fuertes reestructuraciones espaciales producto de los intentos de inserción del continente dentro de la economía mundial y de la aplicación diferenciada de nuevos modelos de sustitución de importaciones, que intentan administrar las tensiones de la apertura externa. En este contexto, se han registrado cambios estructurales a través de la ocupación de nuevos espacios y la resignificación de otros, tanto urbano como rurales, que han resultado funcionales a las necesidades del comercio internacional, al crecimiento del mercado interno, a las estrategias de expansión de las grandes empresas y a objetivos de políticas públicas. Simultáneamente, las nuevas tecnologías de la información han favorecido cambios significativos en las prácticas productivas y han facilitado el desarrollo del transporte y de las telecomunicaciones, intensificando los flujos de intercambio de bienes, servicios y conocimientos entre empresas, sectores económicos y territorios, dando origen a la formación de redes muy complejas. De acuerdo a Veltz (2000), esto supone la emergencia de una relación sistémica entre lo abstracto y lo concreto, lo global y lo local, que es considerada como la principal característica del nuevo modelo socio-territorial que se perfila, donde las desigualdades se manifiestan básicamente por la capacidad de integración de las sociedades y los territorios al sistema mundo. Desde esta concepción, la incorporación activa dentro del nuevo orden mundial requiere de una fuerte competencia entre territorios, que hace necesario que cada localidad y región aproveche al máximo sus recursos y capacidades. Los efectos de esta modalidad competitiva en América Latina han sido, esencialmente, de dos tipos. Por un lado, se ha registrado un número importante de territorios que no logran adecuarse a esta realidad, por lo que registran altos índices de marginación de su población e importantes niveles de exclusión de los principales circuitos de acumulación de capital. Por otro lado, se evidencian esfuerzos significativos de reconversión productiva de diversos espacios en búsqueda de mejorar el grado de inserción de sus productos a escala internacional. En este sentido, extensas áreas del continente han resultado ser territorios fértiles para el mercado global, mientras que los espacios excluidos denominados ?perdedores? u ?opacos? profundizan sus condiciones de pobreza y marginalidad (Toledo y Olivares, 2006). En los denominados territorios ganadores, se observan al menos tres elementos que parecen ser claves de su éxito productivo: en primer lugar, la confianza en las propias fuerzas, competencias y recursos para impulsar el desarrollo; en segundo término, la habilidad de los actores locales para articular iniciativas y diseñar estrategias comunes que permitan hacer un mejor uso de los recursos productivos, tecnológicos y organizacionales existentes; en tercer lugar, la capacidad de las empresas y organizaciones territoriales para innovar, impulsando la fabricación de nuevos productos y el diseño de nuevos procesos de producción, que permitan captar rentas extraordinarias en los mercados nacionales e internacionales. A su vez, la constatación de estos tres elementos claves en los nuevos espacios emergentes ha provocado el surgimiento de distintas recomendaciones de política que buscan potenciar tales rasgos, con el objetivo fundamental de incrementar las inversiones, el empleo y el bienestar social en espacios marginales, tanto urbanos como rurales. Motivo de este giro en la política pública, se perciben cambios en los discursos acerca de las estrategias de desarrollo que deberían promover los gobiernos centrales y la aparición de nuevos criterios que priorizan la potenciación de los recursos locales, la sinergía entre actores territoriales y la apropiación y difusión del conocimiento en la escala regional.La presente publicación analiza precisamente como estos preceptos, con las especificaciones propias de la política argentina, están siendo aplicados en el contexto del Sudoeste Bonaerense . La misma evalúa las prácticas de diferentes actores e intenta vislumbrar si es factible lograr un despegue económico del territorio en base a la lógica de la innovación y de la acción colectiva, y en que medida estas iniciativas pueden y necesitan asociarse con otras acciones. Desde esta óptica, el libro presenta un doble objetivo: describir los aspectos fundamentales sobre los cuales descansa habitualmente la estrategia de desarrollo económico territorial y simultáneamente, analizar con una mirada crítica la presencia u ausencia de estos preceptos en el área objeto de estudio.