INVESTIGADORES
MARTINEZ Ignacio Manuel
congresos y reuniones científicas
Título:
Constitución de la jerarquía diocesana en Argentina. Formación, trayectoria institucional y mecanismos de selección de los obispos instituidos entre 1850 y 1870.
Autor/es:
IGNACIO MARTÍNEZ
Lugar:
Mendoza
Reunión:
Workshop; Workshop ?Unificación nacional, elites políticas y burocracias estatales en el siglo XIX. Enfoques globales, nacionales y regionales; 2016
Institución organizadora:
Instituto de Ciencias Humanas, Sociales y Ambientales, CCT - Mendoza, Conicet
Resumen:
La jerarquía diocesana en la Argentina fue considerada parte del funcionariado de la nación. Los sueldos de los obispos y los gastos que implicaba la estructura de gobierno de las diócesis provenían del presupuesto nacional. Antes de la sanción de las leyes laicas, la jurisdicción eclesiástica tenía a su cargo funciones tan importantes como el registro de nacimientos, matrimonios y defunciones. A ello debe sumarse el peso de las instituciones eclesiásticas en rubros tan sensibles como la educación, la asistencia social o la salud. Como autoridades nombradas formalmente por el gobierno de la nación, los obispos fueron conminados en ciertas ocasiones a obrar como sus agentes frente a resistencias de sectores eclesiásticos y seglares en las provincias. Como gobernantes de jurisdicciones supraprovinciales jugaron un importante rol en la construcción de estructuras de gobierno regionales y, particularmente luego de la elevación de Buenos Aires a arquidiócesis, nacionales. Esto no convertía a los obispos, sin embargo, en meros representantes del gobierno nacional. Su fidelidad y legitimidad estaba repartida entre la soberanía nacional y la autoridad pontificia (de quien recibían, incluso para los menos papistas, al menos sus potestad como máximos sacerdotes). Esta tensión se manifiesta en la retórica que legitimó sus medidas de gobierno ¬?donde se alternaban argumentos regalistas con otros ultramontanos?, y en las medidas mismas, que tendían a restar autonomía de gobierno a las jerarquías eclesiásticas provinciales, pero no siempre a favor de una obediencia absoluta al soberano nacional. La tensión de esa doble fidelidad tiene su reflejo en la formación y en las trayectorias políticas y eclesiásticas de los eclesiásticos que fueron considerados por el gobierno nacional y por Roma para ocupar las sedes diocesanas en las décadas de 1850 y 1860. Hasta el momento he reconstruido parcialmente esas trayectorias a partir de la consulta de bibliografía previa y de archivos pontificios en Roma. Me interesa exponer en el taller el modo en que he trabajado sobre este aspecto y poner a consideración de los colegas los caminos a seguir, fundamentalmente a partir del trabajo en archivos locales.