Los eventos extremos de precipitación alteran la estructura trófica en bromelias tanque en el neotrópico

MONTERO, G.; FREIRE R.; BARBERIS I.M.

Rosario

Mesa redonda; XXIII Congreso y XLI Reunión Anual de la Sociedad de Biología de Rosario; 2021

Sociedad de Biología de Rosario

Entre los efectos del cambio climático se prevé la alteración de las precipitaciones a nivel global, tanto en frecuencia como en cantidad, causando inundaciones y sequías. Estos eventos extremos producirían cambios en la mayoría de los ecosistemas, pero especialmente en los de agua dulce. Las bromelias tanque son plantas típicas de los bosques neotropicales y constituyen un sistema modelo con hojas en forma de roseta que pueden contener agua de lluvia y de este modo forman microcosmos naturales que constituyen un ecosistema. Allí se acumula hojarasca, microorganismos (bacterias, hongos, algas, protozoos) y macroorganismos detritívoros y predadores (insectos, crustáceos, moluscos). Una red internacional de investigadores realizamos un experimento simultáneo en siete sitios distribuidos desde Costa Rica a Argentina utilizando un protocolo estandarizado para analizar las respuestas de las redes tróficas presentes en bromelias tanque frente al cambio climático. Se evaluó la hipótesis de que las variaciones hidrológicas inducidas por la manipulación de la precipitación alteran la forma de las pirámides tróficas, es decir, la distribución de biomasa y el flujo de masa y energía entre los diferentes niveles. Para cada sitio se simularon distintos escenarios de precipitaciones considerando la variación de los últimos diez años durante los dos meses en los que se realizaría el experimento. Los distintos escenarios contemplaron variaciones en la frecuencia de eventos (½×, 1×, y 2× frecuencia promedio) y la cantidad de mm caídos (10 niveles: 10% - 300% intensidad promedio). En cada sitio se seleccionaron 30 bromelias tanque de tamaño similar, se colocaron debajo de un refugio plástico y a cada una se le asignó una de las combinaciones de riego (3 frecuencias × 10 intensidades). Durante 60 días, cada planta recibió la cantidad de agua distribuida a lo largo del tiempo según el tratamiento que le correspondiera y finalmente, fueron cosechadas. Se separaron e identificaron los invertebrados presentes en el tanque y fueron clasificados de acuerdo a su nivel trófico en detritívoros y predadores. La biomasa de detritívoros fue mayor en condiciones hidrológicas estables. La biomasa de predadores tope disminuyó con el aumento de la frecuencia de precipitación en todos los sitios, a pesar de las diferencias naturales en la identidad de las especies y la biomasa inicial. Los meso-predadores no fueron afectados por la manipulación de la precipitación. En relación a los predadores, cuando las precipitaciones son poco frecuentes, aumentan en cantidad y la biomasa puede ser superior a la de los descomponedores. Esto podría deberse a que a medida que se va reduciendo la cantidad de agua disponible, el predador tiene más facilidad para encontrar las presas, y a su vez la mayor concentración de recursos permite que crezcan más. Por otro lado, el predador en general tiene una vida más larga y mayor resistencia a la sequía. Es decir que existen factores dados por el sistema, por la misma dinámica del agua y otros que están asociados a las características de los insectos en sí. Estos resultados sugieren una intensificación de las interacciones tróficas y en consecuencia una mayor inestabilidad del ecosistema. Por lo tanto, teniendo en cuenta los pronósticos para las próximas décadas, en un futuro cercano se deben esperar fuertes cambios en la estructura y la dinámica de las redes tróficas en respuesta a los cambios en los regímenes de precipitaciones.