INBIOSUR   25013
INSTITUTO DE CIENCIAS BIOLOGICAS Y BIOMEDICAS DEL SUR
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
¿ES LA TÉCNICA MICROGRÁFICA UN MÉTODO ADECUADO PARA DETERMINAR QUÉ ESPECIES DE MACRÓFITAS SUMERGIDAS SON INGERIDAS POR POMACEA CANALICULATA?
Autor/es:
MARTÍN PABLO RAFAEL; MANARA ENZO
Lugar:
Bahía Blanca
Reunión:
Congreso; 3 CAM; 2019
Resumen:
La dieta natural de Pomacea canaliculata es de gran importancia para poder comprender los efectos producidos por su herbivoría sobre la estructura de la comunidades de macrófitas sumergidas. Una correcta determinación de las especies consumidas a partir del análisis de los contenidos digestivos permitiría establecer con precisión que macrófitas son consumidas por este ampulárido en ambientes naturales. Sin embargo, la potente rádula y la musculosa molleja de este caracol junto con la fragilidad la de los tejidos de las macrófitas sumergidas podrían impedir el reconocimiento y la cuantificación.Nuestro objetivo fue evaluar si es posible identificar a nivel específico los restos de macrófitas provenientes del contenido digestivo de P. canaliculata y estimar las cantidades ingeridas de cada especie en condiciones de oferta mono- y múltiespecífica. Fueron utilizadas las cinco macrófitas más abundantes en los arroyos del SO bonaerense (Argentina): Chara contraria (Charophyta), Zannichellia palustris L., Stuckenia striata (Potamogetonaceae), Myriophyllum quitense (Haloragaceae) y Ludwigia peploides (Onagraceae).Cada una de las cinco macrófitas fue ofrecida a 10 caracoles en forma individual (oferta monoespecífica) por un periodo de 24 hs. Al mismo tiempo se ofrecieron las cinco macrófitas en simultáneo a otros 10 caracoles (oferta múltiespecífica). En cada frasco se colocaron un caracol y aproximadamente 2 g de cada macrófita. Una vez concluidas las 24 hs se estimó la cantidad ingerida de cada macrófita a partir de los pesos iniciales y finales de las mismas y se procedió a extraer el tubo digestivo de los caracoles para su análisis bajo microscopio estereoscópico.Todos los caracoles se alimentaron al menos de una de las macrófitas ofrecidas. Encontramos restos vegetales en todos los intestinos y en el 90% de los estómagos del ensayo de oferta monoespecífica. En algunos de estos restos vegetales se pudieron identificar caracteres diagnósticos que hicieron posible un reconocimiento de las macrófitas a nivel específico. A partir de estos caracteres diagnósticos pudimos reconocer los restos vegetales de las cinco especies de macrófitas provenientes de los contenidos digestivos de los caracoles del ensayo de oferta múltiple. En líneas generales no hubo diferencias significativas en el porcentaje de fragmentos vegetales reconocibles entre estómago e intestino tanto en el ensayo de oferta mono- como múltiespecífica. La cantidad de fragmentos identificables en relación a la cantidad ingerida puede variar de una macrófita a otra. Esto podría deberse a una diferencia en la fragmentación de los tejidos vegetales durante la ingesta y digestión, lo cual depende de la morfología propia de cada una y dificulta la cuantificación en términos comparables de los restos ingeridos.El análisis de los contenidos digestivos a través de la técnica micrográfica demostró ser una herramienta efectiva para la identificación de las macrófitas ingeridas por P. canaliculata. Sin embargo, para que la identificación sea posible es recomendable conocer de antemano las especies de macrófitas disponibles para la ingesta y determinar experimentalmente qué caracteres diagnósticos de las mismas sobreviven a la ingestión y digestión.