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Se preparó un material apto para generar un biofertilizante basado en quitosano y alcohol-polivílico, mediante la técnica de goteo sobre una solución de trípolifosfato de sodio, usado como agente entrecruzante. Las matrices poliméricas obtenidas se utilizaron como soporte para la inmovilización de las bacterias promotoras del crecimiento vegetal A. brasilense Az39 (Az) y P. fluorescens ZME4 (Ps) en forma separada o combinada. Se evaluó la morfología del material preparado con y sin las bacterias por microscopía electrónica de barrido (SEM), y la sobrevida bacteriana en el soporte durante ocho meses de almacenamiento a temperatura y humedad ambiente. El estudio morfológico reveló que las matrices poliméricas poseen forma esférica irregular con tamaño promedio entre 1.9 y 2.1 mm de diámetro, son porosas y su superficie es rugosa. Se observó una alta concentración de bacterias sobre la superficie y dentro del material. Comparando las micrografías de los xerogeles cargados se observó que las bacterias por separado o en conjunto formaron un biofilm que les permitió adherirse al soporte, Az y Ps juntas presentaron un alto nivel de ordenamiento en forma de monocapas y zonas con agregados celulares formando biofilms multicapas. En relación a la sobrevida de las bacterias durante 8 meses de almacenamiento, se observó una disminución en un orden de magnitud en el número total de células viables inicialmente cargadas producto del secado [1]. Luego el número total de células viables se mantuvo relativamente constante por 8 meses, siendo 1.90x108 y 1.92x107 UFC·g-1 para Az y Ps, respectivamente. Los resultados indican que el material obtenido y el método de encapsulación utilizado resultaron efectivos para el desarrollo de una tecnología simple y económica para la formulación de inoculantes manteniendo viables las bacterias durante un largo periodo de tiempo y en altos títulos.