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Las bajas temperaturas pueden generar daños de dos tipos: por congelamiento, causado por temperaturas debajo de 0°C y por enfriamiento, que para plantas tropicales ocurre a temperaturas por debajo de los 10°C. Estos daños afectan diferentes tejidos y en casos más extremos la planta entera. Los sistemas de manejo actuales en el cultivo de yerba mate (monocultivo/agroforestal) generan condiciones ambientales particulares que pueden afectar de manera diferencial la susceptibilidad de las plantas de yerba mate. En este proyecto se evaluó la resistencia a las bajas temperaturas en hojas y ramas terminales de yerba mate creciendo en monocultivo, en consorcio con cedro australiano (Toona ciliata) y bajo bosque nativo. Se emplearon dos técnicas: a) análisis térmico diferencial, basado en la determinación de la temperatura de formación de hielo en los tejidos y b) % de daño en los tejidos a diferentes temperaturas cuantificado a partir de los cambios en la conductividad de los electrolitos (medida indirecta del daño celular). Se encontró que las hojas se congelan a temperaturas más bajas que las ramas terminales (-2,7 °C y -2,3°C respectivamente) en los tres sistemas de cultivo evaluados. El 50% de daño por bajas temperaturas en los tejidos (TL50), en cambio, varío entre los manejos y entre los tejidos. Para el monocultivo y bajo bosque nativo las hojas presentaron una TL50 de 7°C y las ramas de 3°C, mientras que en el sistema en consorcio con T. ciliata el patrón fue inverso, donde la TL50 de hojas fue 0,7°C y la de ramas 4,2°C. Estos resultados indican, que las plantas de yerba mate son sensibles a las bajas temperaturas, pero varía con el manejo. Además, la presencia de hojas en las plantas de yerba mate durante la época de bajas temperaturas podría brindar protección a la planta entera, ya que las hojas son más resistentes a la congelación que las ramas.