CIS   24481
CENTRO DE INVESTIGACIONES SOCIALES
Unidad Ejecutora - UE
capítulos de libros
Título:
El orden de la crisis y la percepción de la destrucción. Intervenciones mediáticas,intérpretes públicos y la imaginación del futuro
Autor/es:
VISACOVSKY, SERGIO EDUARDO
Libro:
La comunicación en un eventual escenario de transición y posconficto.
Editorial:
Universidad de Santo Tomás
Referencias:
Lugar: Bogotá; Año: 2016; p. 253 - 272
Resumen:
Podemos aprender cuestiones importantes sobre este evento particular denominado "crisis 2001". Quizá esta meta de conocimiento sea algo frustrante para quienes esperan conocer las causas de las crisis y cómo superarlas, pero de acuerdo a mi intención de estudiar cómo las personas experimentan, piensan, hablan sobre la crisis, sostengo que por este camino podemos realizar contribuciones a la agenda de investigación sobre los modos de pensar la Argentina por parte de los argentinos. Al mismo tiempo, entiendo que el estudio de circunstancias críticas como la que aquí refiero puede ayudarnos a entender mejor la índole de estos eventos más allá del caso específico argentino, así como el modo en que los actores se las arreglan para organizar las experiencias de lo vivido y generar respuestas. Voy a proponer un recorrido que permita, en primer lugar, entender cómo se constituyen los eventos que llamamos habitualmente crisis. Y para ello, quiero detenerme en especial sobre el lugar que tienen los medios de comunicación. Quiero sugerir aquí que en nuestras sociedades los medios tienen un papel decisivo en la definición de la existencia y sentido de los eventos en tanto "crisis", y qué esto posee consecuencias muy especiales. Definir una situación como ?crisis? no es algo independiente de las interpretaciones de la misma buscando causas, responsabilidades y salidas. Estas tareas interpretativas sólo pueden ser gestadas por ciertos personajes públicos que dispongan de una determinada autoridad, lo cual dependerá de las circunstancias cambiantes en cada caso, y de la potencialidad de reconocimiento de tal autoridad por parte de las diferentes audiencias. Al menos en el caso argentino, una vez instituida la crisis, los medios de comunicación apelaron a la autoridad de ciertos intérpretes, quienes a través de sus intervenciones públicas activaron la circulación de narraciones sobre los orígenes de la nación. A través de éstas, pretendieron hacer inteligibles las causas de los males presentes como un episodio de los males del pasado. La producción y circulación de imágenes de futuro en tiempos de incertidumbre dependía de si esta cadena fatídica podía ser rota para siempre.