INVESTIGADORES
LIDA Miranda
artículos
Título:
Roberto Russell (editor), Argentina 1910-2010. Balance del siglo
Autor/es:
LIDA, MIRANDA
Revista:
Temas de Historia argentina y americana
Editorial:
Universidad Católica Argentina
Referencias:
Lugar: Buenos Aires; Año: 2011 vol. 18 p. 325 - 327
ISSN:
1666-8146
Resumen:
Pocas veces se encuentran libros compilados que presenten tanta cohesión interna como el que nos ofrece Roberto Russell. No sólo pesa la talla de los colaboradores del libro en el resultado final: Carlos Altamirano, Pablo Gerchunoff, Luis Alberto Romero y Juan Carlos Torre. Es tanto o más significativo el hecho de que el editor de este libro invitara a colaborar a sus autores con una clara idea de lo que aspiraba a lograr como resultado final: un balance del siglo transcurrido entre el primer y el segundo centenario de la Argentina. El libro puede ser leído de muchas maneras. Una de ellas es como si se tratara de un análisis de la historia argentina, desde las vísperas de la Ley Sáenz Peña, hasta la actualidad. Un balance historiográfico, y no un juicio, de un siglo XX que llevó a la Argentina del optimismo de 1910, con su inagotable promesa de progreso, al desencanto actual, signado por un amenazador nubarrón que sugiere una profunda decadencia En un siglo, el país atravesó un camino, sin duda sinuoso, en el que por momentos se dejó invadir por la sensación derrotista —y algo exagerada— de que se avecinaba una catástrofe inminente. Y ello a pesar de que Argentina, al menos, tuvo la suerte de no sufrir en carne propia ninguna de las devastadoras guerras, algunas de ellas mundiales, que destrozaron países y sociedades enteras, en Europa y otras partes. En pleno siglo XX, con sus guerras totales y sus genocidios de millones y millones de personas, Argentina no sufrió en todo el siglo XX, pese a todo, ninguna catástrofe de comparable envergadura a las que, por ejemplo, padeció Europa entre las dos guerras mundiales. Por ejemplo, cuando Stefan Zweig visitó la Argentina en 1936 tuvo la sensación de que aquí las cosas estaban muchísimo mejor que en Europa, a la que creía ya en crisis terminal, y eso que el nazismo no había desplegado todavía toda su potencial agresividad. No hay nada más poderoso que la sensación subjetiva de fracaso, decadencia y desazón para distorsionar la comprensión histórica. En este sentido, pues, nada más atinado que el modo en que este libro plantea este problema, con la intención de deshacer lugares comunes y abordar con ecuanimidad la historia argentina del siglo XX, con todos sus claroscuros.