Reacción institucional o avanzada dictatorial: las tensiones entre el Congreso y el Ejecutivo a comienzos del siglo XX

MARTÍN O. CASTRO

Mar del Plata

Congreso; XVI Jornadas Interescuelas en Historia; 2017

Universidad Nacional de Mar del Plata

La clausura de las sesiones extraordinarias del Congreso argentino dispuesta por el presidente José Figueroa Alcorta en enero de 1908 dejó expuestas la fragilidad de los alineamientos políticos de las dirigencias nacionales y provinciales y las dificultades del gobierno nacional por contar con una coalición parlamentaria estable. Esta ponencia busca explorar el rol y el lugar del Congreso en el ordenamiento político argentino a partir del estudio del debate generado en la prensa, entre los publicistas y los parlamentarios sobre la legitimidad del llamado ?golpe de estado? de 1908. Se busca analizar el carácter disruptivo de la medida inesperada introducida por el gobierno de Figueroa Alcorta y avanzar en la comprensión de las relaciones entre el Poder Ejecutivo Nacional y el Congreso durante el orden conservador a la luz de la comparación del conflicto de 1908 con las tensiones experimentadas en la década de 1890 relativas a la solidez de los ejecutivos y al alcance de la división de poderes. Si por una parte la cuestión del sufragio había, sin dudas, demostrado una predominancia en décadas previas (la transparencia de las prácticas electorales, el rol de las máquinas políticas, la participación de los ciudadanos en las campañas electorales y en el acto de la votación), la crisis representativa expuesta con el ?golpe de estado? iba a dejar en evidencia la interconexión entre la importancia de la influencia electoral argumentada extensamente por la prensa (los alcances y limitaciones de los gobiernos electores, las dimensiones de la competencia electoral) y la presencia de instituciones constitutivas del gobierno representativo. En un contexto de fragmentación de la elite política, el crecimiento de la influencia de dirigentes antirroquistas que propugnaban una mirada regeneracionista y/o reformista conducirán a fuertes tensiones en las relaciones entre el parlamento - que enfrentaba críticas de la prensa y de sectores de la opinión pública- y el Poder Ejecutivo nacional. Esta ponencia se propone analizar los manifiestos publicados por los legisladores opositores luego del decreto de enero de 1908, los debates en la prensa en los meses siguientes y la discusión parlamentaria de mayo del mismo año, que girarían en torno a tópicos centrales en el funcionamiento de la división de poderes: la violación de la independencia parlamentaria, la avanzada autoritaria del Poder Ejecutivo, la representatividad del Congreso y el peligro de la unanimidad legislativa.