INSTITUTO "DR. E.RAVIGNANI"   24160
INSTITUTO DE HISTORIA ARGENTINA Y AMERICANA "DR. EMILIO RAVIGNANI"
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
Sostener el culto. Estado, clero y religiosidad en Buenos Aires |1822-1852
Autor/es:
BARRAL, MARÍA ELENA; BINETTI, JESÚS
Lugar:
Mendoza
Reunión:
Congreso; XIV Jornadas Interescuelas de Historia; 2013
Institución organizadora:
UNCUYO
Resumen:
Esta contribución busca analizar algunos aspectos de las tres primeras décadas de existencia del prepuesto de culto bonaerense: su evolución, su distribución al interior de las instituciones y cargos religiosos y los modos y transformaciones de financiamiento del culto público de las fiestas. Sólo de manera complementaria, el procesamiento y análisis de una gran cantidad de información sobre este último punto -el sostenimiento del complejo festivo luego de las reformas rivadavianas- nos permitirá considerar la pertinencia de la tesis del presupuesto como compensación. Siguiendo algunos abordajes previos estructuramos en tres partes esta ponencia. La primera parte procura indagar en las transformaciones que durante un lapso de poco más de tres décadas se fueron acumulando sobre el presupuesto de culto. El periodo parece ser particularmente de interés en la medida que alcanza al final de la etapa rosista, permitiéndonos observar los eventuales cambios que el gobierno del "Restaurador" -siempre sospechado de motivar una suerte de reflujo modernizador- trajo en la relación entre el estado y la Iglesia; aunque no por casualidad se negó a derogar la ley de reforma heredada de la feliz experiencia, más allá de que algunos de los cambios que introdujo fueron en sentido contrario . La segunda parte analiza la distribución de los recursos asignados al culto católico. En igual sentido, tratamos de identificar los sectores del clero favorecidos por el presupuesto estatal, distinguiendo también a aquellos no alcanzados por la supuesta ?mano salvadora? del estado. En la tercera parte damos cuenta de la organización básica que tenía el calendario religioso de la ciudad de Buenos Aires al momento de producirse la reforma, deteniéndonos, particularmente, en las celebraciones sostenidas por el Cabildo. De mano de algunos trabajos que para otros espacios abordaron similar problemática , procuramos desentrañar luego parte de las motivaciones y consecuencias inmediatas de los cambios. Para ellos nos centramos en el destino que tuvieron los recursos estatales, diferenciando las festividades que ?sobrevivieron? de aquellas que desaparecieron. En las conclusiones intentamos realizar reflexiones muy iniciales en torno al problema de la laicización/secularización. Creemos que el abordaje del derrotero que durante tres décadas tuvo el catolicismo en los dos aspectos enunciados ?su estructura institucional y una parte importante de sus prácticas colectivas- nos habilita a ello, más allá de ser obligadamente somero y esquemático. De hecho, muchas de las críticas que desde la década de 1980 se lanzaron contra la teoría ?tradicional? de la secularización , formalizada en los ?60 , son susceptibles de articularse con la base empírica que reconstruimos, comenzando por la negación de la supuesta irreversibilidad del fenómeno. Asimismo, procuramos vincular nuestras observaciones con algunos de los elementos comunes que guardan los actuales paradigmas, entre ellos, el de la ?diferenciación? de esferas. Con matices y partiendo de acercamiento en muchos casos disímiles, la mayoría de los abordajes historiográficos recientes entienden que las reformas rivadavianas implicaron un cambio de escenario en el cual la institución eclesiástica debió redefinir sus prerrogativas y su influencia frente a un poder político y una sociedad que dejó de confundirse con ella. En esta dirección, no sólo parece de interés observar la forma en la que la Iglesia comenzó a identificarse en un dominio institucional propio y separado de los restantes, sino también reconocer los aspectos más importantes del umbral que alcanzó en esa ?diferenciación? a mediados del siglo XIX. Ciertamente no estaríamos adelantando ningún corolario al afirmar que la misma existencia de un presupuesto destinado al culto señala tanto los avances como los límites de las tendencias laicizadoras del periodo.