INSTITUTO "DR. E.RAVIGNANI"   24160
INSTITUTO DE HISTORIA ARGENTINA Y AMERICANA "DR. EMILIO RAVIGNANI"
Unidad Ejecutora - UE
capítulos de libros
Título:
Alrededor de septiembre de 1930 en Argentina: ¿Qué sentido para la "revolución"?
Autor/es:
MARIANNE GONZÁLEZ ALEMÁN
Libro:
Revoluciones imaginadas. Itinerarios de la idea revolucionaria en América Latina contemporánea
Editorial:
RIL Editores
Referencias:
Lugar: Santiago de Chile; Año: 2013; p. 51 - 72
Resumen:
La "revolución" del 6 de septiembre ha sido representada por la historiografía como uno de los puntos de ruptura de la historia contemporánea argentina. La palabra "revolución" quedó directamente asociada al golpe de estado y al corto régimen dictatorial que le sucedió, y sólo las causas y lógicas internas a los acontecimientos fueron tomadas en cuenta en los relatos, tanto de los actores contemporáneos de los hechos como de los historiadores. Resulta sin embargo interesante detenerse en el sentido que los actores del 6 de septiembre, y sobre todo de la fase de movilización anterior al derrocamiento de Yrigoyen, otorgaron al término "revolución" y al contenido "revolucionario" de sus acciones. Durante los meses que precedieron la jornada de septiembre, la palabra "revolución" fue omnipresente en el espacio público y designó inmediatamente la toma de poder. Es que el repertorio revolucionario como modalidad de la participación política constituía un fenómeno de larga data de la cultura política porteña. Se articulaba tradicionalmente con otras dimensiones de la vida cívica republicana que delineaban los contornos de una ciudadanía no limitada al voto. En este sentido, es menester tomar en cuenta dos espacios claves de la intervención ciudadana, la calle y la urna, para analizar de qué manera, en 1930, se articularon con la figura de la "revolución". Sostenemos que a través de la reactivación de una serie de consignas, símbolos, representaciones y prácticas ritualizadas, los miembros de la oposición pusieron en primer plano una retórica con fuertes reminiscencias del viejo republicanismo clásico, produciendo así un escenario en donde la apelación a la "defensa de las instituciones" justificaba paradójicamente el recurso al campo extra-institucional. En particular, tendieron a exaltar la acción como virtud cívica y como forma legítima de expresión política de los ciudadanos erguidos en amparo de los "valores republicanos". Este artículo propone historizar el repertorio revolucionario para reflexionar luego en la manera en que éste se vió investido en 1930. Sostenemos que a través del motivo de la "revolución" la oposición participó de la conformación de un campo político en el que la calle podía funcionar como un espacio de contrucción de una legitimidad puntualmente antagónica a la que había surgido del sufragio.