IDACOR   23984
INSTITUTO DE ANTROPOLOGIA DE CORDOBA
Unidad Ejecutora - UE
libros
Título:
De pircas, cardones, rastrojos, chivos y cuevas. La historia de la comunidad aborigen de Huachichocana
Autor/es:
A, CRUZ DE TOLABA; B, TOLABA; C. MAMANÍ; C. G. TOLABA; F. CRUZ; F. TOLABA; G. D. MAMANI; G. MARTÍNEZ DE CRUZ; I. CRUZ; I. ZAMBRANO; J.CASIMIRO; J. C. MARTÍNEZ; J. TOLABA; L. MAMANI; M. I. CRUZ; M.CRUZ; M. TOLABA; P. MAMANI; P. BARRIONUEVO; P. MAMANI; S. J. CRUZ; T. CRUZ; U. TOLABA; V. TOLABA; V. MAMANI; V. MARTÍNEZ; Y. MAMANI; J. BARRIONUEVO; LEMA, VERÓNICA (COMP); PAZZARELLI, FRANCISCO (COMP)
Editorial:
Comunidad Aborigen de Huachichocana
Referencias:
Lugar: La Plata; Año: 2015 p. 200
ISSN:
978-987-33-7247-6
Resumen:
La idea de este libro nació a partir de nuestro trabajo como antropólogos y arqueólogos en la comunidad de Huachichocana y del interés de los miembros de dicha comunidad acerca del destino de la información que íbamos compilando en nuestras charlas, entrevistas y recorridos por los distintos lugares, caminos y parajes, junto a ellos. Fue así, atendiendo a esta inquietud y desde el mutuo entendimiento, que a través de conversaciones con distintas personas y familias, y también en asambleas comunitarias, se fue desarrollando y acordando la propuesta de un libro sobre la historia de los parajes y familias que dieron lugar a la Comunidad Aborigen de Huachichocana. Toda la información que figura en este libro pertenece a las personas que nos fueron relatando su historia y la de sus familias, sus vivencias cotidianas, sus conocimientos de tareas y tradiciones, permitiéndonos compartir el día a día junto a ellos para que pudiéramos aprender cómo es vivir en cada paraje, con cada familia. Así, nos fuimos conociendo más, haciéndonos muy cercanos y sintiéndonos tan cómodos como en casa. El libro, como un todo, es propiedad intelectual de la Comunidad Aborigen de Huachichocana y es ésta la única autorizada para la reproducción y usufructo del mismo. La redacción general del libro estuvo a cargo de Verónica Lema y Francisco Pazzarelli a partir de registros de su trabajo en la comunidad de Huachichocana -y otras cercanas donde viven personas de la misma- realizados entre los años 2010 y 2014. Los restantes compiladores son alumnos y jóvenes graduados de la Universidad de La Plata, tanto de la carrera de antropología como de biología; todos ellos aportaron a la redacción de este libro y estuvieron también a cargo del registro de información entre los años 2012 y 2013. La participación de todos ellos en los trabajos realizados en los parajes de Huachichocana fue posible gracias a un Proyecto de Voluntariado Universitario del Ministerio de Educación de la Nación, acordado y aprobado por la Comunidad Aborigen, al igual que de fondos aportados por las mencionadas universidades, el CONICET y la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica.El trabajo en la Comunidad, que uno de nosotros (Verónica Lema) inició en 2010, se nutrió en todo momento de una relación directa, franca y amena con las familias, quienes siempre nos asistieron, acompañaron y recibieron de puertas abiertas cada vez que los visitamos en los años siguientes. En los recorridos realizados durante estas visitas fue desarrollándose, poco a poco, un interés por plasmar la "historia" de Huachichocana en papel. Aquellas primeras charlas, en el frío invierno de 2012, fueron las que comenzaron a definir la idea de un libro. Seguimos recorriendo las casas y puestos de las familias y la idea comenzó a cobrar más fuerza, hasta que a fines de ese mismo año tuvimos la oportunidad de conversarlo en una Asamblea Comunitaria y de llevar los primeros esbozos de lo que luego sería un primer capítulo. Desde ese momento y hasta ahora, todas las visitas que hicimos incluyeron la presentación de textos preliminares que las familias tuvieron oportunidad de leer y corregir. Esos borradores fueron re escritos varias veces a lo largo de ese tiempo, con idas y vueltas, hasta llegar a un número definitivo de capítulos a fines de 2013. En medio de este trabajo, tuvimos la oportunidad de publicar parcialmente una parte de los relatos compilados con motivo del aniversario de la Escuela de la Comunidad, a fines de 2013. Hoy, esa pequeña historia forma parte del capítulo 3 de este libro. Finalmente, llegamos a 2014, y el texto trabajado durante casi dos años se discutió en una Asamblea/Taller comunitario, llevado a cabo en diciembre, donde se aprobó la versión final para publicar. La dinámica de trabajo incluyó el registro escrito de información que surgía tanto de entrevistas pautadas con las personas, o bien de conversaciones informales durante caminatas por el lugar, celebraciones festivas o la realización de tareas cotidianas como pastar, cultivar, hilar o cocinar. Se tomaron fotos para completar el registro y se realizaron dibujos y esquemas de casas, puestos, rastrojos y objetos, que nos ayudaran a entender mejor y compartir nuestras apreciaciones con la gente de Huachichocana. A fin de entender la historia de las familias, hicimos cuadros genealógicos, los cuales re elaboramos numerosas veces gracias a sucesivas aclaraciones y correcciones que nos iban haciendo acerca de las relaciones de parentesco pasadas y presentes. Nuestro aprendizaje llevó tiempo para poder también apreciar y comprender un paisaje que tenía cada vez más lugares, historias y nombres nuevos para nosotros. Hicimos mapas y algunos huacheños se animaron también a hacer los suyos para orientarnos; es que contar historias no es solo recorrer el tiempo, sino también el espacio. También nos valimos de la tecnología para completar estos mapas y con un GPS marcamos los recorridos que hacíamos, siempre junto a alguien de la comunidad, que con paciencia y esmero nos guiaba y relataba las peculiaridades de cada espacio, de cada casa, puesto y lugar. Hicimos muchos mapas, compilando toda la información reunida y luego los íbamos llevando en las distintas oportunidades en que visitábamos la comunidad, para que las personas ?chicos y adultos- pudieran corregirlos, agregar o quitar datos y nuevos relatos. Así también fuimos redactando los capítulos del libro, en cada viaje llevábamos borradores que entregamos a las familias para que hicieran sus correcciones, agregaran información o sacaran datos equivocados. Paciencia, tiempo y confianza fue el mayor regalo que nos hicieron a lo largo de todo este proceso. Los autores de este libro, a pesar de sus muchas ocupaciones, siempre se hacían un tiempo para leer, solos o en familia lo que habíamos escrito a partir de su información; a veces con los más chicos leyéndole a los mayores mientras estos seguían con alguna faena, aprendiendo ellos también historias de sus familias-. Muchos de ellos también nos ofrecieron fotos, tomadas por ellos o de parientes ya fallecidos, cuyas vidas también pasaron a formar parte de este libro. Asimismo muchos nos regalaron bellas coplas, que el lector tiene también ahora oportunidad de leer. A partir de este trabajo que emprendimos juntos durante estos años es que hoy podemos contar la historia de las distintas familias que conformaron la comunidad, y de las que la conforman y sostienen actualmente con sus actividades y saberes. A lo largo de los capítulos se van hilvanando también los relatos acerca de la historia de la Escuela Primaria Nº 93, de los oratorios y capillas, de las rutas, caminos y de los distintos parajes que la constituyen. También se cuenta cómo es la vida actualmente, las actividades que se llevan a cabo, sus fiestas patronales, fechas especiales como la Señalada y el Darle de comer a la tierra en agosto, el trabajo con la hacienda, con los sembraderos y rastrojos o la confección de quesos, entre muchas otras cuestiones. El esfuerzo conjunto que hace más de diez años dio lugar a la conformación de la Comunidad Aborigen de Huachichocana también es relatado al inicio de este libro. Este fue un logro destacado de las personas que proyectaron, gestionaron y trabajaron para que el mismo se concretara y prospere día a día La propuesta original de este libro y su concreción siempre se basaron en la investigación participativa y en una idea de construcción conjunta, plural y abierta. Se trata, sin dudas, de una co-investigación. En nuestra tarea como compiladores procuramos que las líneas escritas y el diseño del libro reflejen los modos de percibir y sentir la historia local de la manera lo más cercana posible a como la relatan y la sienten los propios miembros de la comunidad. Los temas, la forma de abordarlos y el lenguaje utilizado fueron elegidos por las propias personas, lo que nos alienta a pensar que se trata de una historia cercana al modo en que ellos mismos se la contarían a algún viajero. Fue también nuestra intención que este libro sea un medio de enriquecer dicha historia a través de la unión de relatos dispersos en las voces de las familias y que aporte a la memoria de los miembros más jóvenes de la comunidad.(Nota: debido al peso del archivo, se adjunta una muestra del mismo).