Buenos días Señor Quebracho. Una arqueología de la ausencia.

MARCONETTO M.B.; GARDENAL G.; BARRÍA P.

San Felipe, el Almendral

Congreso; VII Reunión de Teoría Arqueológica de América del Sur; 2014

La arqueología disciplinada es un tanto temerosa. Teme, a cosas como la etnografía, el folklore, las historias. Se aterra ante la posible analogía etnográfica directa y curiosamente no se espanta de las efectivas analogías directas al presente occidental, de entender a las plantas como recursos económicos, de enraizar en el pasado y naturalizar consecuentemente, la lógica de los agro-negocios. Esperamos de las arqueologías indisciplinadas habiliten el deambular por caminos pantanosos. El camino que nos proponemos andar se relaciona con una ausencia que llama la atención. La ausencia -o tal vez mejor, la mínima presencia- de los ?quebrachos? en contextos arqueológicos de zonas en las que los mismos abundan. En un intento de dialogar con la ausencia recorreremos algunas sendas de la mano de experiencias etnográficas y relatos folklóricos que nos permitan quebrar sentidos propios acerca del vínculo entre humanos y plantas. Los quiebra-hachas, colorados y blancos, acreditan una interesante trayectoria como ?condensadores? en términos de Coupaye (2012) en el Chaco argentino, siendo el caso tal vez más conocido y analizado: La Forestal. Existe un rico acervo de relatos que los tienen como protagonistas. Una serie de prácticas se le vinculan, se lo respeta, no se lo toca sin permiso y no se puede pasar junto a él sin saludarlo. Buenos días Señor Quebracho? permiso, nos dejaría charlar un momento con usted de Arqueología?