IQUIBICEN   23947
INSTITUTO DE QUIMICA BIOLOGICA DE LA FACULTAD DE CIENCIAS EXACTAS Y NATURALES
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
Respuestas del gasterópodo nativo Chilina gibbosa frente a plaguicidas anticolinesterásicos ¿Mismos mecanismos de acción, diferentes estrategias?
Autor/es:
COSSI, PAULA FANNY; KRISTOFF, GISELA; HERBERT, LUCILA THOMSETT; LUQUET, CARLOS; MENGONI, CAROLINA
Lugar:
San Luis
Reunión:
Congreso; VII Congreso Argentino de la Sociedad de Toxicología y Química Ambiental de Argentina (SETAC Argentina); 2018
Resumen:
Chilina gibbosa es un gasterópodo de agua dulce importante dentro dela cadena trófica de ecosistemas acuáticos patagónicos con un alto riesgo deexposición a tóxicos en el ambiente. En aguas de esta región se reportarontrazas de insecticidas organofosforados (OP), metilazinfos (MAZ) y clorpirifós (CLP) y del carbamato carbaril (CAR). Estos insecticidas inhiben la actividadde las enzimas colinesterasas (ChE) y causan acumulación de acetilcolina ysobre estimulación de los receptores colinérgicos. Las ChE y lascarboxilesterasas (CE), también inhibidas por OP y carbamatos, sonbiomarcadores de elección para los efectos de estos anticolinesterásicos. Entrabajos previos estudiamos la sensibilidad de C. gibbosa a MAZ y CAR. Todos los caracoles expuestos a MAZ ≥ 0,01µgL-1 presentaron un conspicuo signo de neurotoxicidad (protrusiónde la región céfalo-pedal fuera de la concha) que podría utilizarse como alarmatemprana. No observamos este signo frente a CAR. Las ChEs de C. gibbosa resultaron más sensibles aMAZ que las CEs (CI50 0,02 y 1000 µgL-1); para CAR lasensibilidad entre ChE y CE fue similar (CI50 37 y 11 µgL-1).Con el objetivo de establecer si estos signos de neurotoxicidad y sucorrelación con alta sensibilidad de ChE y baja de CE son específicos para MAZo comunes a los OP, estudiamos la sensibilidad de C. gibbosa a CLP. Realizamos un bioensayo de 48h conconcentraciones de CLP entre 500 y 7500 µgL-1. Utilizamos 8caracoles por concentración expuestos individualmente en recipientes de vidriode 150mL con agua a 10±2 °C y ciclo luz:oscuridad 12:12h. A las 48 hregistramos signos de neurotoxicidad y realizamos homogenatos de tejido blandopara determinar contenido de proteínas y actividades de ChE y CE. Noencontramos signos de neurotoxicidad y estimamos una CI50 867µgL-1para ChE; mucho mayor que para MAZ y CAR. No encontramos efecto sobre CE. Se hapostulado que cuando las CE tienen mayor sensibilidad que ChE a los OP,protegen a las ChE de inhibición y no se observan signos neurotóxicos (comopara CAR en C. gibbosa). Cuando lasCE no tienen este efecto protector, se observarían los signos (como para MAZ).En el caso de CLP, no observamos signos de neurotoxicidad y las CE tienen menorsensibilidad que las ChE, que a su vez son poco sensibles. Estos resultadosabren nuevos interrogantes sobre la especificidad de la respuesta de C. gibbosa a MAZ y sobre qué determina lasdiferencias en los efectos de estos plaguicidas anticolinesterásicos.