UNITEFA   23945
UNIDAD DE INVESTIGACION Y DESARROLLO EN TECNOLOGIA FARMACEUTICA
Unidad Ejecutora - UE
capítulos de libros
Título:
Aspectos Biofarmacéuticos y tecnológicos que impactan en la absorción y la biodisponibilidad de los medicamentos
Autor/es:
OLIVERA ME; LUCIANI GIACOBBE LC; GUZMAN ML
Libro:
Topicos de Tecnología Farmacéutica- Volumen 1
Editorial:
Editorial Universitaria de Buenos Aires (Eudeba)
Referencias:
Año: 2019; p. 37 - 54
Resumen:
Para facilitar su administración, aceptación y dosificación los fármacos son convenientemente combinados con excipientes convenientes para ser formulados como medicamentos en diversas formas farmacéuticas. Las formas farmacéuticas en que puede ser elaborado un medicamento pueden variar desde simples soluciones a complejos sistemas de liberación, utilizando excipientes apropiados o dispositivos para su administración. La administración de un medicamento a un ser vivo desencadena en el organismo una serie de eventos conocidos como acción medicamentosa o procesos LADME (liberación, absorción, distribución, metabolismo y excreción). Tal como se muestra en la figura 1, la acción medicamentosa puede ser también dividida en 3 fases, la fase farmacéutica, la fase farmacocinética y la fase farmacodinámica. Para que el proceso de absorción tenga lugar, el fármaco contenido en la forma farmacéutica debe liberarse y disolverse en los fluidos que lo rodean. Este proceso está limitado por la solubilidad del fármaco en las condiciones que ofrece el sitio de administración. Todos los eventos que tienen lugar previo a la absorción, corresponden a la fase farmacéutica de la acción medicamentosa y, en consecuencia, la magnitud y la velocidad de absorción del medicamento (es decir su biodisponibilidad) van a depender de la magnitud y la velocidad con la que el fármaco se libere de la forma farmacéutica que lo contiene y de la capacidad de ese fármaco para atravesar las membranas (es decir, su permeabilidad). Una vez que la absorción tiene lugar, el fármaco es distribuido en el organismo a través de la circulación sistémica. Paralelamente, se ponen en marcha los procesos de eliminación (metabolismo y excreción). Esta etapa se conoce como fase farmacocinética. Finalmente, el fármaco que accede a los órganos diana podrá interactuar con los receptores celulares dando lugar a una respuesta biológica conocida como la fase farmacodinámica. Una vez absorbido, el fármaco debe llegar al sitio de acción (también conocido como sitio diana o biofase) para interactuar con los receptores celulares o sistemas enzimáticos y así producir los efectos terapéuticos buscados. La cantidad de fármaco que accede a la biofase y el tiempo que tarda en llegar y en desaparecer de allí, condicionan la intensidad y la duración de la respuesta farmacológica. A su vez, la cantidad que llega dependerá de la dosis administrada, de la magnitud en que se absorbe, de cómo se distribuye y la velocidad y magnitud con la que el organismo lo excreta. En consecuencia, la magnitud e intensidad de la respuesta a la administración de un medicamento depende de una serie de características propias del fármaco, de la formulación que lo contiene, de la vía de administración y de las características del paciente, incluyendo su edad y la patología. Dichas características serán desarrolladas a lo largo de este capítulo.