Cultura política, militantes y movilización. Neuquén durante los años '90

AIZICZON, FERNANDO

Prometeo

Lugar: Ciudad Autónoma de Buenos Aires; Año: 2017 p. 384

978-987-574-859-0

Los militantes actúan de acuerdo a un conjunto de valores, normas, conductas, símbolos, ritos, etc. que operan en una dimensión mayor: la cultura. Como ordenamiento simbólico de la vida social, la cultura moldea nuestra existencia colectiva y determina un campo de posibilidades que los grupos toman, desarrollan y transforman, aunque siempre bajo el imperio de una clase dominante, de las ideas de una clase dominante cuyo dominio se expresa en relaciones sociales de producción. No obstante, la práctica de la dominación encuentra resistencias, impugnaciones, grupos que rechazan subordinarse y que en consecuencia entran, en determinados períodos históricos, en lucha abierta contra esa forma de dominación; allí se abre la posibilidad a la reconstrucción de modos alternativos de vida, al ejercicio de prácticas que desafían los sentidos dominantes y si bien no se puede hablar de una cultura completamente separada de aquella, sí se ha planteado la conformación de culturas (en plural) o subculturas. En el caso neuquino, nuestra hipótesis sostiene la construcción de una cultura política de protesta durante los años ?90, posible merced a la práctica de determinados actores sociales (los militantes) con determinadas competencias culturales y políticas, como ser el dominio de la oratoria (argumentación, descripción de una situación, capacidad de expresión oral, etc.), el conocimiento de la dinámica de los conflictos mediante la acumulación de experiencias prácticas, y ciertos aprendizajes obtenidos en organizaciones políticas diversas, que constituirían un ?saber hacer? apto para la acción y la eventual movilización de otros actores. Estas competencias se plasmarían en algunos actores específicos a modo de un habitus militante, es decir, un conjunto de estructuras subjetivas, orientaciones prácticas incorporadas tanto conciente como inconcientemente, que deben ejercitarse permanentemente constituyendo la base de una disposición para la acción