IDH   23901
INSTITUTO DE HUMANIDADES
Unidad Ejecutora - UE
libros
Título:
Aparatos estéticos I. Literatura, arte y cine contemporáneos
Autor/es:
MATTONI, SILVIO; PACELLA, CECILIA
Editorial:
Ferreyra Editor
Referencias:
Lugar: Córdoba; Año: 2015 p. 236
ISSN:
978-987-1742-83-7
Resumen:
Este libro incluye ensayos y artículos producidos por los integrantes de un equipo de investigación, pero que también fue un grupo de discusión en torno a ciertos temas que dibujarían una constelación particular, cuya amplitud puede ya anticiparse en el título del proyecto que planeamos en conjunto: ARTE, ESCRITURA Y PENSAMIENTO CONTEMPORÁNEOS: EXPERIENCIAS, CRÍTICAS Y PRÁCTICAS ESTÉTICAS. Cada cual traía consigo el interés en ciertos objetos, que podríamos se relacionaban con la estética, o más precisamente, con la teoría y la filosofía del arte. Pero en el interior de este término algo ambiguo, el ?arte?, se encontraban miradas específicas, de modo que tanto el cine más experimental como las prácticas artísticas contemporáneas tenían allí su lugar. Y el conjunto, siempre incompleto, se abría además a la literatura, esa antigua práctica cuya relación con artes visuales y sonoras fue desde tiempos remotos una cuestión problemática. Convinimos en llamar a los objetos y los modos de aproximación a esos objetos diversos con el nombre de ?aparatos?, que de manera casi redundante podían calificarse de ?estéticos?, siguiendo la nomenclatura de un filósofo contemporáneo, Jean-Louis Déotte, quien llamó ?aparatos estéticos? a fenómenos igualmente diversos, pero finitos, tales como la perspectiva en la pintura, el psicoanálisis en la fenomenología de la conciencia o en su escisión, la fotografía, el cine. No obstante, casi toda elaboración teórica puede ser un aparato de percepción, un órgano artificial de acceso a lo sensible, desde las ideas platónicas al punto de certeza del yo cartesiano, desde la ciencia aristotélica hasta la postulación de múltiples perspectivas que se imponen al mundo o que directamente lo construyen. El ?aparato? es todo, y entonces puede ser nada, simplemente lo que existe. Lo importante sería su costado técnico y su inserción en la sensibilidad de los cuerpos. Pero, ¿no serían también los nombres y los seres que responden a sus nombres otros tantos aparatos? ¿No subyace alguna verdad en la ironía que le daba a nuestro grupo mensual de discusión el rótulo de ?aparatos?? Ser un aparato, en nuestra habla común, es una manera de la excentricidad, e indicaba quizás que no nos interesaban aspectos demasiado centrales en el arte, el cine y la literatura contemporáneos, aunque también y sobre todo había una excentricidad radical en la manera de abordar los temas. Incluso lo contemporáneo nunca fue un problema histórico: el romanticismo alemán o el joven Lukács nos interpelaron tan urgentemente como un desplazamiento tecnológico de apariencia nueva en la música o el cine, porque de alguna manera la cuestión técnica del arte no hacía más que ocultar la tautología del pensamiento estético. La estética debe hablar estéticamente del arte, según un filósofo admonitorio al que no dejamos de escuchar, es decir: había que escribir, no solamente hacer ?trabajos?, ?estudios?, ?papeles de investigación?. Y cómo escribir, con qué sujeto, con qué amor al objeto, son modulaciones de una pregunta técnica.