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Nuestra ponencia se ancla en el contexto de la reapertura democrática con ánimo de merodear en las disputas que ocurrieron en los espacios feministas de ese entonces en torno a los sentidos atribuidos al feminismo y a la política feminista. Nos interesan en particular esas disputas ya que consideramos forman parte de las condiciones de posibilidad de la ampliación de las bases populares del movimiento feminista argentino en la actualidad. Como mostraremos en un primer momento, atravesados por un clima de época que auspició la participación política y social, los colectivos feministas existentes se enfrentaron a una proliferación de activismos femeninos y feministas que no sólo derivó en un proceso de heterogeneización, sino que también precipitó la problematización del sentido de ser feminista y de las estrategias de lucha posibles desde el propio feminismo. Así pues, los primeros Encuentros Nacionales de Mujeres en los años ochenta, organizados e impulsados por los feminismos locales, estuvieron signados por procesos de diferenciación, negociación y articulación de los sentidos atribuidos a la política feminista. En un segundo momento de la ponencia entonces, nos proponemos justamente descifrar algunos de esos procesos, centrándonos específicamente en la relación estrecha que los activismos feministas entablaron con agrupaciones femeninas como Madres y Abuelas de Plaza de Mayo. Nuestro interés en ese acercamiento tiene que ver con poder entender este vínculo no meramente en términos de una alianza estratégica duradera, sino más bien como resultado de actos de identificación política que involucraron posicionamientos ético-políticos en torno a la democracia, la política y el estado. Finalmente, indagaremos las implicancias de esta identificación política de largo alcance en el devenir de los activismos feministas, aspirando también en este recorrido, poder decir algo sobre algunas de las condiciones que posibilitaron su presente