Carlos Astrada, la realidad y el ensueño conjugados.

GARRIDO JUAN IGNACIO

Córdoba

Jornada; XIX Jornadas de Investigación en Artes; 2015

Facultad de Artes Centro de Producción e Investigación en Artes, UNC

En agosto del 68, en el segundo año de su revista Kairós, en su cuarto número, Astrada escribe un artículo medular: Realismo de la utopía. La arbitrariedad de nuestra elección para analizarlo, entre tanto material a desempolvar en esta publicación, se corresponde con la potencia que guarda el ensayo desde el título mismo de su escrito, donde ya se conjugan los términos del (des)encuentro entre realidad, imaginación y política. Astrada se dispone a realizar una genealogía de la utopía que se distancie de la hegemonía espiritualista desde la cual siempre se la ha concebido, y que al mismo tiempo, se desprenda también de las pretensiones sociologístas, que procuran establecer la ley del pensamiento utópico al comparar las creaciones novelescas de la fantasía con la realidad. Correspondencia entre fantasía y realidad inútil de buscar, ya que nada tiene que ver con la ?dialéctica inmanente? que para Astrada moviliza a la utopía y que empieza con una rotundo no a lo existente, donde justamente la correspondencia entre realidad y fantasía estalla, al menos en uno de sus avatares. Astrada se propone advertir la emergencia de la utopía como producto de una ?realidad circundante?, de un lugar cuyas coordenadas están dadas por la experiencia cultural e histórica de un pueblo. Nos detendremos en esta operación crítica, que se vuelve central cuando Astrada procura revisar la tradición utópica en la izquierda y pone bajo la mira al socialismo utópico.