NUEVOS APORTES PARA LA CARACTERIZACIÓN GEOMORFOLOGÍCA DEL ÁREA DEL VOLCÁN COPAHUE

FORTE P.; CASELLI A.T.

Córdoba

Congreso; XIX Congreso Geologico Argentino; 2014

Asociación Geologica Argentina

González Díaz (2005). En dicho trabajo el autor define al paisaje de la región como de tipo policíclico y compuesto, con la participación de un proceso endógeno y múltiples exógenos. El proceso endógeno al que hace referencia, y define como dominante, es el volcánico. A su vez, reconoce la participación de procesos fluviales y glaciarios como modeladores del paisaje. Esta contribución busca acercar nuevos aportes para la caracterización geomorfológica del área del volcán Copahue. A partir de trabajos de campo realizados en esta zona, fue posible reconocer la presencia de geoformas de origen fluvial, glaciario y volcánico que ya habían sido descriptas por otros autores, a su vez que se avanzó en la identificación y caracterización de otras que aún no lo habían sido. Una de las geoformas más destacadas de la zona son las de origen glaciario. Se reconocen geoformas tanto depositacionales como erosivas (surcos, estrías glaciarias y muescas semilunares) que evidencian la presencia de grandes volúmenes de hielo en el pasado. En este sentido, González Díaz (2005) planteó la existencia de un único episodio glaciario que tuvo lugar durante Pleistoceno y que produjo el englazamiento de toda la región. Para este período, propone al volcán Copahue como el centro de alimentación hacia ambas vertientes y la presencia de una calota de hielo de un espesor aproximado de 800 metros cubriendo la caldera Caviahue que se encontraba ubicada en una posición intermedia entre el centro de alimentación y los glaciares de valle de descarga. Para comprender como se desplazaron estas masas de hielo que cubrieron la zona del Copahue en el pasado, se realizó la medición de las direcciones de las estrías presentes en las rocas que conforman el edificio volcánico. El análisis de las mismas permite definir un patrón de distribución radial con 2 direcciones predominantes, una NNE y otra E-SE (Fig. 1). Al vincular estas direcciones con posibles recorridos de masas de hielo desplazándose desde las zonas elevadas del Copahue, se observa que las mismas se encauzaron en las zonas actualmente deprimidas, acomodándose prácticamente al relieve actual. Esto da la pauta que el mismo no sufrió grandes modificaciones producto del englazamiento, lo que permite a su vez, confirmar al proceso volcánico como principal agente modelador del paisaje, y en particular la actividad que ocurrió previa al englazamiento de la zona. Por otro lado, el patrón de distribución radial obtenido permite validar la idea de González Díaz (2005), con el volcán Copahue como un centro de alimentación hacia ambas vertientes.