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Aimé Bonpland llegó al río de la Plata en 1818. En 1820 viajó a Corrientes y finalizó estableciéndose en Misiones. En diciembre de 1821, tropas de José Gaspar Rodríguez de Francia,Dictador Perpetuo del Paraguay, lo tomaron prisionero, liberándolo cerca de diez años después, a comienzos de 1831. Bonpland vivió entonces en São Borja,Rio Grande do Sul, Brasil y, por último, en Santa Ana, próximo a Paso de los Libres, provincia de Corrientes. Durante este período recorrió profusamente la región realizando importantes colecciones de objetos naturales. Gran parte de la colección de fósiles y rocas que atesorara en estos años fue enviada por Bonpland a Paris a comienzos de 1837, siendo ese mismo año recibida y catalogada en el Muséum National d´Histoire Naturelle. La colección incluía,de acuerdo al catálogo enviado por Bonpland y el catálogo de recepción de la misma realizado por el Muséum, más de ciento cincuenta rocas y fósiles mayormente provenientes de niveles cenozoicos del noreste de la Argentina, entre los que se destacaban los bivalvos fósiles recuperados en los niveles marinos del Mioceno de la Bajada, actual Paraná,provincia de Entre Ríos. Bonpland describió sucintamente en su catálogo algunos de los bivalvos enviados a Paris,en especial, un par de especímenes que nominó cardites. En base al material de Bonpland, d´Orbigny instituyó una nueva especie en su Voyage dans l´Amérique méridionale de 1842 y la dedicó al colector. La descripción de los fósiles de Bonpland, a diferencia de la de d´Orbigny, es morfológicamente imprecisa e incluye términos arcaicos, que remiten a enciclopedias de historia natural de fines del siglo XVIII y comienzos del siglo XIX. Sin embargo, la caracterización que hizo Bonpland de sus cardites resulta muy gráfica y parece concordar con la diagnosis de la especie hoy conocida como Anadara bonplandiana(d´Orbigny).