INVELEC   23402
INSTITUTO DE INVESTIGACIONES SOBRE EL LENGUAJE Y LA CULTURA
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
Traducir-traicionar-recordar: delaciones en el Manuscrito quechua de Huarochirí (1608)
Autor/es:
OSCAR MARTÍN AGUIERREZ
Lugar:
San Miguel de Tucumán
Reunión:
Congreso; CONGRESO INTERNACIONAL EDUCACIÓN Y POLÍTICA EN EL CAMINO HACIA UN NUEVO HUMANISMO; 2019
Institución organizadora:
Facultad de Filosofía y Letras, Universidad Nacional de Tucumán
Resumen:
Esta ponencia se inscribe en una investigación mayor que indaga en la lógica del Archivo colonial latinoamericano a partir de un corpus de manuscritos alojados en la biblioteca privada del mestizo expósito Francisco de Ávila (1573-1647), primer juez visitador de idolatrías del Perú, cura doctrinero de Huarochirí, personaje central de la vida cultural limeña (su biblioteca es la más grande e importante de Lima) y clave en el reinicio de las campañas de extirpación idolátricas del siglo XVII. Estos aspectos se abordan partir de la figura de Ávila como un lector extirpador que esconde manuscritos de autoría indígena y de otros agentes coloniales, deja sus huellas de lectura/supervisión sobre los textos y decide no publicarlos. Ávila lee, copia, archiva, traduce, escribe en los márgenes de manuscritos propios y ajenos, reescribe, recopila información y esconde. Todos estos gestos se despliegan en un contexto complejo (el cruce de siglos XVI-XVII) en el que el mundo prehispánico andino es sometido al orden colonial ayudado por la ley, la letra y la violencia. Además coincide con un giro hacia la institucionalización de la visita idolátrica, el reinicio de las Campañas de Extirpación con un fuerte matiz jurídico e inquisitorial, una línea de continuidad en la lógica de colonización (Subirats, 1994) del continente y un pliegue en los modos de evangelizar el Nuevo Mundo respecto al siglo XVI. Este conjunto de aspectos resultan necesarios para incorporar al indio a un sistema de trabajo y a una economía monetaria europeas.Me interesa abordar los modos en que las prácticas de lectura, traducción y ejercicio de la memoria se vinculan, resignifican y se tornan instancias de disciplinamiento en la comunidad andina de Huarochirí de inicios del siglo XVII. Para ello la ponencia se centra en la traducción de Francisco de Ávila (1608) del Manuscrito quechua de Huarochirí. El texto de partida (el Manuscrito quechua?) es el resultado de una encuesta organizada por nuestro juez visitador en los años que pasó en Huarochirí como cura doctrinero a cargo de la evangelización de los indios con el fin de recolectar documentos sobre el incario y el Perú colonial indígena; su configuración es compleja ya que en el texto intervienen las letras de indios ladinos en el rol de copistas y la del mismo Ávila en acotaciones marginales. El texto de llegada es una traducción manuscrita e incompleta al castellano que elimina la complejidad de voces del original (mediante operaciones de supresión y adición) para darle centralidad a las fábulas de Huarochirí ofrecidas a un ?christiano lector? con el fin de que observe ?la grande ceguedad en que andan las almas que no tienen lumbre de fe? (Ávila, 1966, p. 199). Quien traduce organiza lo que perdura o no en la memoria histórica y lo fija, lo totaliza en representaciones que colonizan el imaginario (Gruzinski, 1991). En ese sentido, el acto de traducir trasciende el aspecto lingüístico para priorizar además la presencia de un lector que hace efectiva una política de traducción. En Francisco de Ávila, esa política se alía al gesto de la sutura y pone al descubierto por una lado, un curioso lector (Benites, 2012) ocupado en tejer equivalencias entre la cultura del incario y la trama de Occidente; por otro, la manipulación misionera (Cesar Itier, 1993) activa de quien lee y traduce.