INVESTIGADORES
CATANZARO Gisela Mara
congresos y reuniones científicas
Título:
La emancipación y nosotros, en este bicentenario
Autor/es:
CATANZARO, GISELA
Lugar:
Buenos Aires
Reunión:
Otro; Foro Universitario por el Bicentenario "1816-2016 Conquistas. Controversias. Desafíos"; 2016
Institución organizadora:
Facultad de Ciencias Sociales, UBA
Resumen:
Si preguntamos qué perfiles de nuestro presente podrían adquirir nueva legibilidad en este aniversario de la independencia nacional, mentando a Derrida tendríamos que decir que parecería tratarse de uno que no quiere hablar con fantasmas. Y esto, para no minar las bases de una contemporaneidad realista, literal y sincera; para no minar las bases de un presente donde una realidad adelgazada -aligerada del exceso de peso de un pasado problemático- se transforma en su propia ideología. Uno de esos fantasmas, que podría volver en la ocasión del Bicentenario, es el del discurso de la emancipación, indisolublemente asociado a la declaración de la independencia nacional. Pero ¿es posible un discurso de la emancipación emancipado, él mismo, de una narrativa histórica sacrificial en la cual los daños producidos sobre las vidas particulares se justifican en función de un bien superior que se habría venido realizando en ellos? ¿Cuánto debe el discurso de la emancipación a la ilusión de un corte que separa absolutamente, en la instantánea del acontecimiento irreversible, un antes y un después? Los dos bordes del abismo sobre el que pende el discurso de la emancipación son los de la continuidad y la discontinuidad absolutas en la historia, asociados al rechazo de toda tensión u opacidad inmanente. Y sin embargo el discurso de la emancipación también habla de lo pendiente de una promesa y de lo vigente del daño. Habla de lo supuestamente concluido, el sufrimiento, como inconcluso, y de la dicha como aquello que aún aguarda su realización. Así, la idea de emancipación no puede ser abandonada sin que con ella caiga también todo anhelo de justicia. Pero antes que en el trazado de cómodas dicotomías y discontinuidades absolutas, ella se potencia en modulaciones capaces de invocarla como un desquiciamiento persistente, un "corte continuado", incesante, y sin garantías de éxito, siempre en tren de reiniciarse a partir de su propia opacidad.