INVESTIGADORES
SOMOZA Gustavo Manuel
congresos y reuniones científicas
Título:
Conferencia Latinoamericana sobre cultivo de peces nativos. Historia y objetivos.
Autor/es:
CARLOS A. MARTÍNEZ-PALACIOS; MAYRA TOLEDO-CUEVAS; GUSTAVO M. SOMOZA
Lugar:
Villavicencio
Reunión:
Congreso; IV Conferencia Latinoamericana sobre cultivo de peces nativos.; 2013
Institución organizadora:
Universidad de los Llanos
Resumen:
La Conferencia Latinoamericana sobre cultivo de peces nativos se realizó por primera vez en Morelia, México, en parte inspirada en una reunión científica denominada "Jornadas de Biología del Pejerrey: Aspectos básicos y Acuicultura", organizadas por los Dres. Leandro Miranda y Gustavo Somoza en la ciudad de Chascomús. Dicha reunión fue, sin planearse originalmente como tal, una reunión internacional sobre el cultivo de atherínidos, como el pejerrey y el pescado blanco de Pátzcuaro, resultando extraordinariamente productiva. Tras estas Jornadas se fortificó la idea de realizar una Conferencia Latinoamericana sobre peces nativos, que en México, a nivel nacional, ya llevaba al menos dos ediciones. Con el impulso definitivo de la Fundación Darwin de Gran Bretaña y el entusiasmo de los Dres. Lindsay G. Ross (Escocia), Gustavo Somoza (Argentina), Carlos Strüssmann (Japón) y de Mayra Toledo Cuevas y Carlos Martínez-Palacios (México) nos lanzamos a la difícil empresa de generar el ambiente necesario para La Primera Edición de esta Conferencia, que se realizó en el año 2006, en la ciudad de Morelia, México. La Conferencia reunió a 8 países, de 3 continentes, con una convocatoria aproximada de 100 participantes, que resultó en un muy agradable ambiente de intercambio de ideas y en una excelente experiencia de trabajo. En ese momento se plantearon los objetivos de estas Conferencias Latinoamericanas y la idea de realizarlas cada dos a tres años. Los objetivos fueron acercar, discutir y establecer lazos de cooperación entre investigadores, técnicos y estudiantes de América Latina y el resto del mundo en un marco de cooperación internacional. La idea fue generar la atmósfera para desarrollar investigaciones que puedan terminar en el cultivo comercial de especies nativas de peces, contribuyendo además a su protección. Además, de constituir un grupo de análisis, con voz autorizada, para influir en lo posible en decisiones gubernamentales, que propicien la investigación de especies nativas a nivel de los gobiernos locales y regionales. La segunda conferencia se desarrolló en Chascomús, Argentina en noviembre del 2009. La Conferencia resulta ser muy éxitosa pues logró atraer a más de 230 participantes de 14 países. En julio del 2011 los Dres. Luis Solis Murgas y Priscila Vieira e Rosa, entusiasmados con este éxito, planean la siguiente reunión en Lavras, Minas Gerais, Brasil, vinculándola al Tercer Congreso Brasileño de Producción de Peces Nativos. La Conferencia logra un muy importante impacto, tanto que logra reunir una gran audiencia a pesar de que días antes otras conferencias mundiales en Acuicultura se habían llevado a cabo en el mismo Brasil. Así se llega a esta IV Conferencia organizada por Instituto de Acuicultura de la Universidad de los Llanos, Villavicencio, Colombia, que además se propone vincularla con el Capítulo de Latinoamérica y el Caribe de la World Aquaculture Society. Pese a la orientación hacia el estudio de los peces nativos de estas conferencias, tenemos muy clara la importancia de la pujante industria de la acuicultura, que tiene un crecimiento sostenido en todo el mundo, pero que cuya economía está basada en el cultivo de especies exóticas. Sin embargo, queda claro también que esta actividad requiere de una infraestructura todavía no alcanzada, por factores tales como: la necesidad de líneas de peces de alto rendimiento, más eficientes en términos de crecimiento y con mejor conversión alimenticia, peces resistentes a enfermedades y parásitos, con una producción sostenida y sustentable de larvas y preferentemente utilizando poblaciones de un solo sexo, entre otras características requeridas para hacer de estos negocios más competitivos, rentables y sustentables. La acuicultura mundial actual no ha contemplado estos aspectos debido a la vorágine que significa la producción y el negocio. No obstante, la investigación científica y tecnológica puede solucionar y cubrir estos requerimientos, lo que permitirá establecer mejores sistemas, amigables con el medio ambiente y con mayor rentabilidad. Claro está que tanto gobiernos como productores e investigadores tendrán que hacer un esfuerzo para llegar a cooperar con recursos, optimizar procesos e incrementar la producción. Por otro lado, no es posible soslayar el hecho de que el cultivo sin control de especies exóticas y su liberación al medio, tanto accidental como intencional, ha dejado desafortunadamente una huella imborrable en poblaciones de peces nativas que todavía no alcanzamos a entender y que pueden tener un impacto muy importante en los ecosistemas. Así, especies valiosas como son los peces blancos mexicanos, las truchas nativas, los pejerreyes Sudamericanos y un sin número de especies de peces con gran importancia en la alimentación de nuestros pueblos pueden haber sido afectadas. O, como en el caso de Panamá, donde especies nativas de peces consumidoras de insectos fueron eliminadas con la introducción del tucunaré (Cicla ocelaris) sudamericano al Lago Gatún, con la consecuente destrucción de una cadena trófica que llevó al incremento incontrolable de Malaria. Todo esto trae a la reflexión la necesidad de realizar trabajos de investigación sobre especies nativas, tanto aquellas en peligro o cuyas pesquerías se encuentran sobre-explotadas por su gran demanda. Adicionalmente algunas especies en Latinoamérica tienen ventajas importantes sobre las exóticas, no solo en términos de bajo impacto en sus zonas naturales de distribución en el caso de "liberaciones", si no que algunas pueden ser extremadamente importantes en la alimentación de nuestros pueblos y además poseer características nutracéuticas relevantes, que usualmente son desconocidas. En este sentido vale la pena recordar el fenómeno expuesto en el film "Curandero de la selva", protagonizado por Sean Connery, que es de gran importancia para evitar la pérdida de especies que, por ignorancia, estamos a punto de extinguir sin conocer el gran valor que poseen para nuestra vida cotidiana y para el bienestar humano, considerando sus propiedades en términos de nutrición y salud. Es por ello que aunque las especies exóticas han creado un nicho económico de producción y economía en nuestros pueblos, es necesario, como condición sine qua non, reconocer nuestra fauna y flora y rescatar también a nuestras propias especies, que vienen a ofrecer económicamente un producto de calidad y un satisfactor para nuestros pueblos, sin la necesidad de la apertura de un nuevo mercado. Ello permitirá también obtener un alimento altamente apreciado, que puede llegar a ser un producto de excelente calidad comercial para un mercado cada vez más exigente. Sin embargo, el desarrollo en el cultivo de especies nativas ha progresado tanto en algunos países, que los productores han iniciado la generación de híbridos, presionados por el éxito del cultivo. Pero estos no representan realmente una ventaja, sino al contrario, un peligro potencial al poder ser liberados en el medio ambiente. Este es uno de los puntos críticos en donde los investigadores deben de tomar un papel protagónico y en donde los gobiernos deberán regular la generación de estos individuos, si no se generan bajo un estricto control y supervisión Finalmente, parecería que los distintos países han entendido, por el camino difícil, tras las grandes pérdidas económicas en sus cultivos, que la importación de nuevas variedades de especies exóticas que pueden acarrear parásitos y enfermedades, que pueden hacer colapsar, en un lapso muy pequeño de tiempo, una economía pujante. Ejemplos de ello son el caso del colapso de salmón en Chile y la actual muerte de juveniles de camarón en México en granjas comerciales, un caso que aún no se resuelve y que además de estar ocasionando enormes pérdidas económicas para los productores, puede hacer colapsar a la industria camaronera mexicana. En cambio, la investigación puede apoyar para el desarrollo de líneas genéticas con mejores características, con una mayor seguridad sanitaria. Especies nativas son hoy por hoy cultivadas en toda la Latinoamérica y es claro que con la imaginación e interés de investigadores y productores se han sorteado problemas básicos y se ha podido llevar a la producción local especies tales como las cachamas o pacús, surubís o pintados, bocachicos o curimbatás, arapaima o paiche y un sin número más de especies marinas como los robalos, las cabrillas, el esmedregal o la cobia, los meros y los lenguados. Países como Argentina, Brasil, Bolivia, Colombia, Chile, México, Perú, Venezuela, entre otros, muestran un importante desarrollo en la acuicultura, no solo de especies exóticas si no de especies Nativas, con lo cual aseguran una producción sustentable para los mercados locales y vislumbran incluso mercados de exportación para algunas de las especies en cultivo. Es claro que tanto los vínculos de cooperación establecidos en estas Conferencias como la nueva capacidad de conformación de redes de investigación, entre Universidades y Centros de Investigación, con apoyos importantes de diversas instancias gubernamentales, permitirán desarrollar el conocimiento necesario para que dichas especies de peces pueda ser llevadas hasta el cultivo comercial, con un despegue mas exitoso y rápido y sin detrimento de las especies exóticas actualmente en cultivo, en las que, como ya se ha mencionado, se requiere también de investigación básica y aplicada. En conclusión el desarrollo de las especies nativas es importante y fundamental para Latinoamérica y su avance aunque es rápido debe hacerse mediante la interacción con el sector científico/tecnológico, con programas que permitan su avance e impidan que se conviertan en especies problema, como lo han sido las especies exóticas cuando las primeras se transfaunan. Los gobiernos deben así propiciar el crecimiento de grupos de investigación de alto nivel que desarrollen las tecnologías necesarias para el conocimiento, cultivo y transferencia de tecnologías, que permitan una acuicultura saludable, sin menoscabo del establecimiento de las tecnologías requeridas para optimizar el uso de especies exóticas.