POSIBLE CICLOS SOLARES EN LOS ARCOS NIVOGLACIALES HEMIANUALES RECIENTES DE LA CORDILLERA DEL COCUY, COLOMBIA

RODRIGO ESPINOZA; JUAN PABLO MILANA

Parana

Congreso; XVII Reunion Argentina de Sedimentologia y VIII Congreso Latinoamericano de Sedimentologia - Parana; 2021

Asociacion Argentina de Sedimentología

Se conoce muy poco acerca de los glaciares colombianos de la Cordillera del Cocuy, a pesar de evidenciar unosde los mayores retrocesos de glaciares aún activos del mundo. La revisión preliminar de imágenes satelitalesmuestra la existencia de una gran cantidad de arcos glaciales inicialmente interpretados como morenas frontalesanuales, formados desde el último máximo glacial, que localmente se correlaciona a la Pequeña Edad de Hielo,asignándosele como fecha del inicio del retroceso alrededor del año 1850 (Van Der Hammen et al., 1980). Llamala atención la existencia de diferentes jerarquías de estos arcos glaciales, que sugieren el efecto de ciclosclimáticos en este rápido retroceso y cuyo origen nos interesó investigar.Se mapearon en detalle ciclos observados a partir de arcos principales y secundarios asociados al retroceso delGlaciar del Toti, en la zona austral de la Cordillera del Cocuy. Los arcos fueron definidos en base a suenvergadura, relacionada al ancho y altura. Se estima que los arcos principales contienen casi tres veces másmaterial detrítico por unidad de longitud que los arcos secundarios, implicando un proceso nivo-glacio-detríticovariable. Reconstruimos una secuencia continua de 116 arcos, separados por 10 arcos principales. Muchos de losarcos menores tienden a converger y divergir en otros arcos más importantes, lo cual en muchos casos se traduceen un mayor ancho del arco combinado. Al calcular el espaciamiento entre los arcos en las zonas frontales, seasignó el valor arbitrario de 0,5 m para el espaciamiento de los arcos amalgamados. Se demarcaron dos perfiles enlas zonas centrales del glaciar que retrocedió. El perfil más extenso (933 m), arroja 8,05 m de espaciamientomedio entre arcos, mientras que el segundo perfil (847 m) dio 7,30 m de espaciamiento medio. Dada la fuertevariación del espaciamiento, se aplicó una media móvil del espaciamiento de 5 arcos, para observar lastendencias. Es notable observar que la media móvil del espaciamiento asociado a los arcos principales es 6,55 m(vs. 8,05 m) y 5,94 m (cf. 7,30 m). El valor medio de los arcos menores contenidos en cada ciclo definido por losprincipales es de 13, pero el máximo es de 17 y el mínimo es de 9. Previo a interpretar estos ciclos, esfundamental entender el mecanismo de formación de los arcos. Las geoformas conocidas más similares son lasmorenas anuales, descritas inicialmente en Islandia (Price, 1970). En Cocuy, estos depósitos no cumplirían con ladefinición de morenas, ya que no se habrían formado estrictamente en el glaciar sino adelante del frente, siendomás de tipo proglacial e incumpliendo con la definición precisa de morena. Aún sin control de campo, la revisiónde numerosas fotos del lugar permite interpretar que la genética de estos arcos es asimilable a los ―pronivalramparts‖, pero en vez de ser el pie de un talud nival, seria glacial. En este punto, la diferencia entre glacial ynival es debatible, ya que los pronival ramparts se forman al pie de rampas de nieve permanente, y si espermanente, serían consideradas glaciares, como lo enuncia la legislación argentina. Por ello, para evitardenominaciones que impliquen una génesis particular, las hemos denominado arcos nivoglaciales.Para entender el origen de estos ciclos, aplicamos el modelo observado en la Cordillera Real de Bolivia quepresenta arcos nivoglaciales a latitud, altura y régimen climático similar (Olivares Rosales y Milana, 2021). Allí,estos arcos se forman durante la estación húmeda, cuando sucede una gran cantidad de precipitaciones que motivael mayor movimiento de flujos de diferente índole que llevan nieve y sedimento al frente del glacial. Durante elresto del año, domina la ablación por la ausencia de nieve que absorba la importante energía ambiental. En elCocuy, los climogramas muestran bimodalidad de las precipitaciones y una estabilidad notable de la temperatura.Por ello, interpretamos que estos arcos nivoglaciales podrían ser en realidad hemianuales, debido a que cadaestación húmeda ocurre cada medio año, tema que será resuelto al contar con dataciones de alta precisión.Concluimos que los ciclos observados responden a cambios en la velocidad de retroceso, que interpretamos serelacionan con el ciclo de ―sunspot‖. Si bien el número de arcos debería ser 22, es probable que, durante lasépocas de menor velocidad de retroceso, varios arcos se amalgamen, formando los arcos principales. Prueba deesta tendencia son los resultados de la media móvil que indica que el promedio de espaciamiento de los arcos esmucho menor para los arcos principales, asociados a menor intensidad irradiativa solar, y por ello menor tasa deablación y de retroceso glacial.