IDIHCS   22126
INSTITUTO DE INVESTIGACIONES EN HUMANIDADES Y CIENCIAS SOCIALES
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
Contexto y pensamiento
Autor/es:
DI GREGORI MARÍA CRISTINA; FEDERICO LÓPEZ
Lugar:
Ciudad Autónoma de México
Reunión:
Congreso; VI Congreso Iberoamericano de Filosofía; 2019
Institución organizadora:
UNAM- Cisc- Comisión Organizadora del Congreso
Resumen:
En un conocido ensayo publicado en 1908 en el que indaga acerca del carácter práctico de la realidad, John Dewey sostiene que ?el conocimiento es la realidad provocando en sí misma un tipo de cambio concreto? (2000, p.161). Como Dewey mismo reconoce, esta tesis resulta ininteligible si se la considera desde el punto de vista clásico según el cual el conocimiento es, esencialmente, una forma de descripción de la realidad, siendo su atributo principal la verdad entendida como correspondencia entre una proposición o una creencia y el mundo. Sin embargo, de acuerdo con dicho autor, aquella tesis no sólo perdería su carácter paradojal sino que resultaría sumamente plausible si elaboráramos una epistemología desde cero, observando, por ejemplo, lo que hacen esos seres humanos a los que llamamos científicos sin ningún sesgo proveniente de la tradición epistemológica. A efectos de elaborar una epistemología pragmatista, por así decirlo, todo lo que debemos conceder es la tesis más o menos obvia de que la realidad tiene un carácter práctico, esto es, que la realidad -esa de la que somos parte los seres humanos, que modificamos según nuestros planes y que frustra o posibilita tales planes- tiene los rasgos que caracterizan la vida práctica. En efecto, Dewey insiste en sus escritos en la idea según la cual la vida es riesgo, es incertidumbre, es necesidad y deseo. La necesidad y el deseo, nos dice, son exponentes del ser natural ?Son? actualizaciones de sus contingencias e incompletitudes, como tal, la naturaleza misma es melancólica y patética, turbulenta y apasionada. Si no fuera así, la existencia de deseos sería un milagro" (LW 1, 58). En este contexto la integridad de la vida humana, tanto en sus experiencias cotidianas como aquellas más refinadas, resultantes de la actividad inteligente (arte, ciencia, religión, ética, etc.), está ligada a su capacidad de reaccionar o responder, es decir de actuar. La acción es para Dewey la categoría de análisis más básica para dar cuenta de lo que entendemos por ?experiencia? y, consecuentemente, del conocimiento. En este contexto, la filosofía para Dewey está atrapada en el curso de los acontecimientos y problemas vitales y si bien ella no es la responsable de resolver estos problemas, su actividad crítica debe estar orientada a ofrecer guías para la acción una vez que logre liberarse de sus viejos compromisos con la descripción de una realidad ajena a la agencia humana, tal como él mismo la entiende. En franco tono crítico, Dewey sostiene que la filosofía se recuperará a sí misma cuando deje de ser un dispositivo para hacer frente a los problemas de los filósofos y se convierta en un método para hacer frente a los problemas de los seres humanos.En este complejo entramado, en el que el cambio, la continuidad y la disrupción caracterizan a la vida misma, incluyendo a toda forma de pensamiento e investigación inteligente, nos detendremos a analizar el valor, el peso vital y argumental que Dewey le ha otorgado a la noción de ?contexto? y las consecuencias que, en el plano de la actividad filosófica ha ocasionado la ignorancia o negación del mismo (la falacia de la universalización ilimitada, por ejemplo). De algún modo puede decirse que para Dewey, la negación del valor del contexto filosófico nos mantiene prisioneros de una tradición o herencia insostenible en la actualidad. Desde una perspectiva más alentadora, Dewey analiza las ventajas de la consideración explícita de las cuestiones contextuales, tanto históricas como teóricas, cuestiones a las que en primera instancia se refiere en términos de trasfondo e interés selectivo y que nos conducirían a lo que entiende en términos de un genuino experimentalismo. Si bien son muchos los aportes realizados durante el siglo XX acerca del valor del contexto en los procesos vitales, científicos, etc. los aportes de Dewey no solo muestran una notoria actualidad sino que puede pensarse que ofrecen una versión radicalizada e integrada en lo que al valor del contexto histórico cultural y teórico se refiere. La noción de contexto adquiere un valor epistemológico radical para proponer un cambio sustancial al modo mismo de hacer filosofía en general y filosofía de la ciencia en particular.