IDIHCS   22126
INSTITUTO DE INVESTIGACIONES EN HUMANIDADES Y CIENCIAS SOCIALES
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
Modos de leer manuscritos en tiempos digitales
Autor/es:
GOLDCHLUK, GRACIELA
Lugar:
Lima
Reunión:
Conferencia; Feria Internacional del Libro de Lima; 2015
Institución organizadora:
Cámara Peruana del Libro
Resumen:
Estos tiempos de blogs y escritura digital son también los tiempos de los manuscritos. No me refiero únicamente a que varios escritores hayan regresado a sus libretas, ya que otros escriben en el Iphone y ninguno escapa al paso por la computadora donde se realizan las acciones de corrección y edición necesarias para entregar el ?borrador? a la editorial. Hoy día, un borrador es un archivo de texto que se envía por e-mail, muy diferente de las hojas mecanografiadas donde nunca faltaban marcas, subrayados y sustituciones de último momento. El último momento desaparece en la limpidez del archivo de texto, aunque sobre él comience un diálogo colorido hecho de comentarios al margen entre editor y escritor. No hablamos únicamente de la proliferación de escrituras que también nacieron de la mano del autor, sino de que reaparecen, se muestran, los borradores tradicionales, aquellos en los que esa mano ha dejado su impronta en el trazo que corrige una cuartilla mecanografiada, o que dibuja la frase con lápiz, birome o pluma. En una primera lectura podría parecer que un poema publicado en borrador es otro porque todavía no ha alcanzado su forma definitiva, pero a poco de mirarlo observamos que tiene una fuerza propia, que irradia sentidos que antes no habíamos advertido y entonces el poema que creíamos conocer, el publicado, también se vuelve otro y ya no estamos tan dispuestas a verlo como definitivo. En esa desconfianza frente a las identidades fijas nace la crítica genética.Una afirmación fundante de la crítica genética es que el manuscrito ya no es pensado como la preparación del texto, sino como su otro. De este modo, el manuscrito se lee en un tiempo y una lógica de un tipo que se separa de la disposición lineal y progresiva a la que nos acostumbró el formato del libro; es otro, pero no es ajeno, establece con ese otro estado de archivación, con esa otra huella de creación que es un texto publicado en alguna de sus posibilidades, un diálogo. Esto implica ver en los manuscritos una disponibilidad que se resignifica en el trabajo con el archivo, y nos permite ver en ellos vestigios de lo porvenir, recuerdos del futuro. Son huellas, escrituras, que por sí mismas no parecen decirnos nada, pero cobran sentido en el contacto con nuevos contextos y con otros documentos. De ese modo, no se vinculan con el pasado sino con lo que todavía no existe. Es esa ?espera abnegada de un porvenir? lo que vamos a buscar en los documentos que exhumamos y lo que impulsa nuestras investigaciones.