IDIHCS   22126
INSTITUTO DE INVESTIGACIONES EN HUMANIDADES Y CIENCIAS SOCIALES
Unidad Ejecutora - UE
capítulos de libros
Título:
Los procesos de formación pedagógica en la Universidad: una propuesta de intervención en la Facultad de Informática de la UNLP.
Autor/es:
UNGARO, ANA MARÍA; FELIPE, CELESTE; GÓMEZ, SOLEDAD
Libro:
La Pedagogía ante los desafíos actuales: debates, propuestas e intervenciones.
Editorial:
Universidad Nacional de Córdoba
Referencias:
Lugar: Córdoba; Año: 2017; p. 191 - 196
Resumen:
En este artículo compartiremos algunas ideas que nos permiten pensar las múltiples situaciones educativas en las que se desarrolla la formación del sujeto y la importancia de la formación pedagógica de los estudiantes y de actores institucionales vinculados al trabajo con otros, que no provienen de disciplinas pedagógicas. Nuestra experiencia concreta, desde la Dirección Pedagógica de la Facultad de Informática, está vinculada a la articulación de las prácticas de gestión académica desde una mirada pedagógico comunicacional que nos habilita nuestra formación. Esta experiencia nos situó frente a la necesidad de posicionarnos en torno a la problemática de la formación desde un lugar más amplio que excede el espacio clásico del aula, como espacio legitimado para identificar los procesos formativos de los estudiantes. Hablamos de estos sujetos, porque en ellos se centra nuestra intervención pedagógica. Desde nuestra óptica, reconocemos que la formación es una decisión de los sujetos que participan de procesos de intervención pedagógica. En este caso, consideramos la capacitación para tutores en la Facultad de Informática durante el período 2011-2013, como central en la estrategia del programa de tutorías. Esta situación nos hizo considerar la importancia de la formación pedagógica en sujetos que no tenían formalmente saberes y habilidades específicos para la tarea de ?ser tutor?. Los tutores de la Facultad de Informática son pares, en tanto son alumnos avanzados de las carreras, y algunos de ellos se encuentran atravesados por sus experiencias en el aula. Con lo cual el espacio de capacitación facilita el desarrollo de la mirada sobre la práctica intervenida, es decir, no sólo pueden analizar su práctica tutorial en tanto trabajo con los alumnos, sino que les permite entender algunas cuestiones de lo que les sucede dentro del aula, en otros roles, como docentes en algunos casos, como alumnos en otros. Si tenemos en cuenta que la propuesta de capacitación tiene que ver con otras áreas de conocimiento, que no son propias de la formación académica elegida, el desafío es grande. Entendiendo que lo disciplinar implica el trabajo desde una interdisciplinariedad que se construye en tanto configuración de un lenguaje común sobre ciertas temáticas y el desarrollo de múltiples posicionamientos disparadores sobre el qué, cómo, por qué y para qué intervenir la realidad, con el objetivo máximo de promover procesos de formación que sean significativos para los estudiantes. La misma situación envuelve un proceso de doble articulación: mientras construimos la mirada y definimos las estrategias abordaje con los estudiantes, nos formamos a nosotros mismos, mediados por lo pedagógico, como intencionalidad de transmitir algo a alguien, que no estrictamente es académico ni estrictamente disciplinar y puede o no develar sus efectos en forma instantánea. Es creer, nada más ni nada menos, que es el otro quien en su condición humana, tiene en sus manos el proceso de su propia formación, pero es también, lo que nos obliga a generar las condiciones para que esa formación no sea un artificio de magia sino una realidad.