IDIHCS   22126
INSTITUTO DE INVESTIGACIONES EN HUMANIDADES Y CIENCIAS SOCIALES
Unidad Ejecutora - UE
capítulos de libros
Título:
Extrativismo neodenvolvimentista e movimientos sociais?. Un giro ecoterritoal rumo a novas alternativas
Autor/es:
MARISTELLA SVAMPA
Libro:
Descolonizar o imaginario. Debates sobre pós-extrativismo altrnativas ao desenvolvimento
Editorial:
El elefante
Referencias:
Lugar: Sao Paulo; Año: 2016; p. 140 - 173
Resumen:
América Latina presenta un escenario sumamente contrastante y perturbador. Ciertamente, la geografía latinoamericana aparece marcada por la emergencia y consolidación de gobiernos progresistas, varios de los cuales se hallan abocados a la tarea de la transformación del Estado, a la ampliación de la democracia participativa, en fin, a la implementación de políticas públicas que tienden a favorecer las condiciones de vida de los sectores más vulnerables. Dichas políticas tienen como sustento un discurso crítico en relación al neoliberalismo de los 1990, y suelen adoptar ?tarde o temprano− una retórica nacional-popular, que enfatiza la constitución de un polo popular en la confrontación con los grandes grupos de poder económicos. Sin embargo, este relato nacional-popular, con características particulares según los países, coexiste con una política que alienta, promueve y convalida la instalación de un modelo neocolonial, basado en la apropiación y destrucción de los recursos naturales. Así, más allá de las retóricas industrialistas y emancipatorias en boga, nuestros gobiernos tienden a aceptar como ?destino? el ?nuevo consenso internacional?, en nombre de las ?ventajas comparativas? o de la pura subordinación al orden geopolítico mundial, el cual históricamente ha reservado a América Latina el rol de exportador de Naturaleza, sin considerar sus impactos desestructurantes sobre la población ni los enormes efectos socioambientales.En términos geopolíticos, la opción extractivista que hoy busca implantarse en la región latinoamericana, desde México a la Argentina, responde a una nueva división territorial y global del trabajo, basado en la apropiación irresponsable de los recursos naturales no renovables, que ha dado lugar a nuevas asimetrías económicas, políticas y ambientales entre el norte y el sur. En este sentido, el extractivismo resultante no es un destino, es una opción política y también civilizatoria, asumida por los diferentes gobiernos, que va reconfigurando negativamente nuestros territorios y economías y genera una nueva dependencia: cada vez exportamos más materias primas, lo cual aparece reflejado en la concentración económica, en la especialización productiva, así como en la consolidación de enclaves de exportación, rasgos que históricamente fueron criticados tanto por el desarrollismo como el marxismo. Esta demanda de materias primas o de bienes de consumo hacia los países dependientes ha conducido a un vertiginoso proceso de reprimarización de la economía latinoamericana que afecta no sólo a países como Bolivia, Ecuador o Perú, que cuentan con una fuerte tradición extractivista, sino incluso a aquellos países con patrones económicos más diversificados, como Brasil y Argentina.