IDIHCS   22126
INSTITUTO DE INVESTIGACIONES EN HUMANIDADES Y CIENCIAS SOCIALES
Unidad Ejecutora - UE
capítulos de libros
Título:
Bergbau und Neo-Extraktivismus in Lateinamerika
Autor/es:
MARISTELLA SVAMPA
Libro:
Der Neue Extraktivismus
Editorial:
Forschungs- und Dokumentationszentrum Chile-Lateinamerika e.V.
Referencias:
Lugar: Berlín; Año: 2012; p. 14 - 24
Resumen:
En el último decenio, América Latina realizó el pasaje del consenso de Washington, asentado sobre la valorización financiera, al Consenso de los Commodities, basado en la exportación de bienes primarios a gran escala. Lo que denominamos como Consenso de los Commodities hace referencia a un nuevo orden económico y político, sostenido por el boom de los precios internacionales de las materias primas y los bienes de consumo, demandados cada vez más por los países centrales y las potencias emergentes. El nuevo ciclo económico se caracteriza por la rentabilidad extraordinaria y las altas tasas de crecimiento de las economías latinoamericanas. Por otro lado, desde el punto de vista de la lógica de acumulación, el nuevo Consenso de los Commodities, conlleva la profundización de una dinámica de desposesión o despojo de tierras, recursos y territorios, al tiempo que genera nuevas formas de dependencia y dominación. El resultado es la consolidación de un estilo de desarrollo extractivista, que debemos comprender como aquel patrón de acumulación basado en la sobre-explotación de recursos naturales, en gran parte, no renovables, así como en la expansión de las fronteras hacia territorios antes considerados como ?improductivos?. Así definido, el extractivismo no contempla solamente actividades típicamente consideradas como tal (minería y petróleo), sino también otras, como el agronegocios o la producción de biocombustibles, que abonan una lógica extractivista a través de la consolidación de un modelo tendencialmente monoproductor, que destruye la biodiversidad, conlleva el acaparamiento de tierras y la reconfiguración negativa de vastos territorios. Por último, otra de las características, es la gran escala de las explotaciones, que ponen en jaque no sólo las formas económicas y sociales existentes, sino también los alcances mismo de la democratización, en la medida en que éstas avanzan sin el consenso de las poblaciones, generando todo tipo de conflictos sociales, divisiones en la sociedad, y una espiral de criminalización de los movimientos de resistencia que sin duda abre un nuevo y peligroso capítulo de violación de los derechos humanos. El actual escenario ilustra no sólo un lógico acoplamiento entre extractivismo neodesarrollista y neoliberalismo, expresado por los casos de Perú, Colombia o México, sino también entre extractivismo neodesarrollista y gobiernos ?progresistas? o de izquierda, que abarcan desde la Argentina y Brasil, hasta Bolivia, Venezuela y Ecuador. En este sentido, los escenarios más paradójicos lo ofrecen Bolivia y Ecuado, pues es en estos dos países donde se han forjado conceptos alternativos, como los de Descolonización, Estado Plurinacional, Autonomías, Buen Vivir y Derechos de la Naturaleza, los cuales fueron marcando la nueva agenda constitucional, en el marco de importantes procesos participativos, con una fuerte contenido indigenista y ecologista.