Detección, caracterización genotípica y sensibilidad antimicrobiana de Escherichia coli productor de toxina Shiga y Escherichia coli O157 no toxigénicos aislados a partir de cerdos sanos de la provincia de Buenos Aires

MOREDO F.A.; PINEYRO P.; CAPUCCIO J.; QUIROGA M.A.; LEOTTA G.A.

Montevideo

Congreso; XX Congreso Latinoamericano de Microbiología. IX Encuentro Nacional de Microbiólogos.; 2010

Sociedad Uruguaya de Microbiología

Con la finalidad de determinar la prevalencia de cerdos portadores de Escherichia coli productor de toxinas Shiga (STEC, stx1, stx2, stx2e)  y E. coli O157 no toxigénicos (rfbO157), en el año 2007, se muestrearon cerdos clínicamente sanos de 11 granjas de producción porcinas de la provincia de Buenos Aires. La población de animales se dividió en tres estratos en función a la edad y etapa de producción: M3 (lechones, 21 días), M6 (crecimiento, 86 días), M8 (terminación, 165 días). A través de la técnica de PCR se procesaron los cultivos primarios de los hisopados rectales. Una vez identificado el animal positivo, se buscaron las colonias portadoras de los genes detectados, para su posterior caracterización y la determinación de la susceptibilidad frente a 18 antimicrobianos por el método de difusión. De las 990 muestras procesadas, hubo desarrollo bacteriano en 986. Se detectaron STEC y E. coli O157 no toxigénico en el 12,4% y 12% de las muestras respectivamente. En el 7,3% (9/122), 2,4% (3/122) y 91% (110/122) de los cerdos portadores de STEC, se detectaron los genes stx1, stx2 y stx2e respectivamente. En el presente estudio, no se detectaron combinaciones entre los genes stx. Los genes stx1 y stx2 se detectaron en el estrato M3 del 36,6% (4/11) y 91% (10/11) de las granjas, respectivamente. Tres animales portadores del gen stx2 se detectaron en una sola granja. En el estrato M3, no se detectaron animales portadores del gen  stx2e en ninguna granja,  pero el 63,6% (7/11) y el 54,4% (6/11) de las granjas fueron positivas para este gen en los estratos M6 y M8 respectivamente. En todas las granjas estudiadas, se detectó el gen rfbO157, 63,6% (7/11), 90,9% (10/11) y 36,4% (4/11) en los estratos M3, M6 y M8 respectivamente. En el presente estudio no se detectaron combinaciones entre los genes stx1, stx2 y rfbO157. En el 45,4% (5/11) de las granjas se detectaron animales portadores de la combinación de genes rfbO157/stx2e. Hasta el momento, se aislaron de los estratos M3 y M6, 22 cepas de STEC: 7 portadoras del gen stx1, 2 del gen stx2 y 13 del gen stx2e; y 12 cepas de E. coli O157 no toxigénicas. El 100% de las cepas fueron sensibles a cefalotina, amoxicilina/ácido clavulánico, cefotaxima, cefoxitina, gentamicina, amicacina, colistina y fosfomicina. Sólo dos cepas portadoras del gen stx1 fueron sensibles a los 18 antimicrobianos probados. El 12% de las cepas fueron sensibles tetraciclina, el 18% a doxiclina, el 37% a estreptomicina, el 61% cloranfenicol y florfenicol, el 73% a trimetoprima/sulfametoxazol, el 79% a ampicilina y ácido nalidíxico y el 97% a ciprofloxacina. Nuestros resultados preliminares no coinciden con los encontrados por otros autores en un muestreo realizado entre los años 1992 y 1997en nuestro país, quienes no detectaron cerdos sanos portadores de STEC y E. coli O157 no toxigénicos. Con respecto a la sensibilidad de las cepas frente a los antimicrobianos estudiados, si bien las resistencias observadas coinciden los tratamientos administrados, existen diferencias en los patrones de sensibilidad entre las granjas estudiadas por lo cuál, es imposible generalizar el comportamiento de las cepas aplicando tratamientos empíricos sino que se deben realizar monitoreos de resistencia periódicos para saber como evolucionan las cepas de cada granja en particular. Desde el punto de vista de la salud pública, es importante destacar que en la población de riesgo M8 no se detectaron STEC sino E. coli O157 no toxigénicos. Este trabajo preliminar aporta nueva información acerca de la distribución de STEC y E. coli O157 no toxigénicos en granjas de producción porcina de la provincia de Buenos Aires y sus patrones de sensibilidad frente a los antimicrobianos más frecuentemente utilizados tanto en medicina veterinaria como en medicina humana.