IGEVET   21075
INSTITUTO DE GENETICA VETERINARIA "ING. FERNANDO NOEL DULOUT"
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
Sobrepeso, obesidad y composición corporal en niños Mbyá-Guaraní de Misiones, Argentina.
Autor/es:
ZONTA L,; GARRAZA M,; ZURITA A,; CUNDOM E,; NAVONE G,; OYHENART E,
Lugar:
Puerto Madryn
Reunión:
Congreso; Novenas Jornadas Nacionales de Antropología Biológica.; 2009
Institución organizadora:
Asociación de Antropología Biológicas
Resumen:
El avance en el aumento del sobrepeso y obesidad en las últimas décadas se ha expresado tanto en países desarrollados como en vías de desarrollo. Los nativos americanos no están exentos de este tipo de malnutrición. El objetivo del presente trabajo fue evaluar el sobrepeso, la obesidad y la composición corporal de niños Mbyá-guaraní de la provincia de Misiones, Argentina. Del estudio participaron 178 niños (53,9% varones y 46,1% mujeres) de Takuapí, Ka´a cupe y El Pocito. Debido al pequeño tamaño muestral, los niños fueron agrupados por intervalos etáreos (1.0-3.9, 4.0-6.9, 7.0-9.9 y 10.0-13.9 años). Se relevaron peso corporal, estatura, perímetro braquial (PB), pliegues subcutáneos subescapular (PS) y tricipital (PT). Se calculó el índice de masa corporal (IMC) a fin de estimar las prevalencias de sobrepeso (S; ≥P85 IMC <P95) y obesidad (O; IMC≥P95) tomando NHANES I y II como referencia. El patrón de distribución adiposa se analizó mediante el índice subescapular/tricipital (IST). Un valor de IST comprendido entre 0.76 y 0.99 se consideró indicador de alto riesgo de distribución centralizada de la adiposidad y uno mayor o igual a 1, indicador de obesidad abdominal. La composición corporal se determinó a partir del análisis de las áreas muscular (AM) y adiposa (AA). Del total de la población analizada, el 45,5% resultó normonutrido, mientras que el 54,5% presentó algún estado de malnutrición. Las prevalencias de sobrepeso y obesidad fueron de 11,2% y 2,2%, respectivamente. El sobrepeso fue mayor en el segundo intervalo etáreo (22,2%) y la obesidad en el primero (5,9%). Los valores z respecto la referencia resultaron menores para PB y AM, superiores para PS y similares para PT y AA. A partir de los 4 años de edad se observó riesgo de adiposidad centralizada con tendencia a incrementarse en las edades mayores. Las elevadas prevalencias de exceso de peso y centralización del tejido adiposo pueden relacionarse con cambios en los hábitos y prácticas alimentarias: mayor consumo de alimentos de alto valor energético, escasa presencia de carne en la dieta, que hasta hace algunas décadas era un recurso abundante y menor dedicación de la población a las actividades tradicionales en la obtención de alimentos. Estos resultados aportan nuevas evidencias no sólo del aumento de la pobreza sino de los cambios en los estilos de vida impuestos a las poblaciones aborígenes. patrón de distribución adiposa se analizó mediante el índice subescapular/tricipital (IST). Un valor de IST comprendido entre 0.76 y 0.99 se consideró indicador de alto riesgo de distribución centralizada de la adiposidad y uno mayor o igual a 1, indicador de obesidad abdominal. La composición corporal se determinó a partir del análisis de las áreas muscular (AM) y adiposa (AA). Del total de la población analizada, el 45,5% resultó normonutrido, mientras que el 54,5% presentó algún estado de malnutrición. Las prevalencias de sobrepeso y obesidad fueron de 11,2% y 2,2%, respectivamente. El sobrepeso fue mayor en el segundo intervalo etáreo (22,2%) y la obesidad en el primero (5,9%). Los valores z respecto la referencia resultaron menores para PB y AM, superiores para PS y similares para PT y AA. A partir de los 4 años de edad se observó riesgo de adiposidad centralizada con tendencia a incrementarse en las edades mayores. Las elevadas prevalencias de exceso de peso y centralización del tejido adiposo pueden relacionarse con cambios en los hábitos y prácticas alimentarias: mayor consumo de alimentos de alto valor energético, escasa presencia de carne en la dieta, que hasta hace algunas décadas era un recurso abundante y menor dedicación de la población a las actividades tradicionales en la obtención de alimentos. Estos resultados aportan nuevas evidencias no sólo del aumento de la pobreza sino de los cambios en los estilos de vida impuestos a las poblaciones aborígenes. P85 IMC <P95) y obesidad (O; IMC≥P95) tomando NHANES I y II como referencia. El patrón de distribución adiposa se analizó mediante el índice subescapular/tricipital (IST). Un valor de IST comprendido entre 0.76 y 0.99 se consideró indicador de alto riesgo de distribución centralizada de la adiposidad y uno mayor o igual a 1, indicador de obesidad abdominal. La composición corporal se determinó a partir del análisis de las áreas muscular (AM) y adiposa (AA). Del total de la población analizada, el 45,5% resultó normonutrido, mientras que el 54,5% presentó algún estado de malnutrición. Las prevalencias de sobrepeso y obesidad fueron de 11,2% y 2,2%, respectivamente. El sobrepeso fue mayor en el segundo intervalo etáreo (22,2%) y la obesidad en el primero (5,9%). Los valores z respecto la referencia resultaron menores para PB y AM, superiores para PS y similares para PT y AA. A partir de los 4 años de edad se observó riesgo de adiposidad centralizada con tendencia a incrementarse en las edades mayores. Las elevadas prevalencias de exceso de peso y centralización del tejido adiposo pueden relacionarse con cambios en los hábitos y prácticas alimentarias: mayor consumo de alimentos de alto valor energético, escasa presencia de carne en la dieta, que hasta hace algunas décadas era un recurso abundante y menor dedicación de la población a las actividades tradicionales en la obtención de alimentos. Estos resultados aportan nuevas evidencias no sólo del aumento de la pobreza sino de los cambios en los estilos de vida impuestos a las poblaciones aborígenes.