Gestación de cachorros viables y piómetra simultánea en la hembra canina: reporte de un caso

A RISSO; PELLEGRINO F; A ARIZMENDI; L PONCE; BENITEZ D; Y CORRADA

Casilda

Jornada; XIV Jornadas de divulgación técnico científicas en ciencias veterinarias; 2013

En la perra, el complejo hiperplasia endometrial quística - piómetra, es una enfermedad hormonal progesterona dependiente del útero que cursa con una complicación infecciosa. Por su parte, en la hembra canina la progesterona es necesaria para el mantenimiento de la preñez. El ambiente fisiológico necesario para llevar adelante una preñez, puede convertirse, en un medio óptimo para el desarrollo de bacterias. Si bien, a la fecha,  existe sólo un reporte de la presencia de gestación y piómetra en forma simultánea en la perra, éste es el primer caso donde una hembra canina con esta patología gestó un cachorro a término. Caso clínico. Una hembra canina de raza dachshund miniatura pelo corto de 4,5 años de edad y peso 5,4kg, ingresó en el Hospital Escuela de la Facultad de Ciencias Veterinarias de la Universidad Nacional de La Plata, con descarga vulvar, decaimiento y polidipsia. La reseña aportó los siguientes datos reproductivos: la hembra recibió su primer servicio en su tercer celo, donde nacieron por cesárea 2 cachorros viables. En el cuarto y quinto celo no recibió servicio alguno, desarrollando en la fase lútea del quinto celo una piómetra a cuello abierto. En esa oportunidad se realizó tratamiento médico basado en la administración de agonistas dopaminérgicos y cloprostenol, combinado con antibióticoterapia, resolviendo favorablemente, pero persistiendo ecográficamente una hiperplasia endometrial moderada. En su sexto y último celo recibió servicio, acudiendo  al Hospital Escuela veinte días después, con la descarga vulvar, decaimiento y polidipsia mencionada precedentemente. Al examen físico se confirmó descarga vulvar purulenta, la temperatura rectal reveló 39,5°C y se observó leve deshidratación. En los estudios complementarios, los resultados del análisis sanguíneo mostraron leve neutrofilia con desvío a la izquierda, mientras que el resto de los parámetros se encontraron dentro de rangos normales. El estudio ecográfico reveló presencia de colecta uterina de moderada a escasa. Se comienza el tratamiento con amoxicilina, ácido clavulánico, y un análogo de GnRH. Cinco días posteriores se realiza un nuevo estudio ecográfico, observándose disminución de la colecta uterina en un cuerno, y presencia de vesículas gestacionales en el cuerno opuesto. La temperatura desciende a valores normales y el animal recupera su actitud normal a lo largo de la gestación. Se continúa con  antibióticoterapia 10 días más y se realizan chequeos clínico y ecográficos semanales para evaluar viabilidad fetal y evolución de la colecta uterina. Diez días previos a la fecha de cesárea programada, se comenzó con doppler fetal diariamente para determinar latidos fetales. Previo a la realización de la cesárea, se indicó radiología, confirmando la presencia de los 2 fetos en el cuerno uterino derecho. Cuando los estudios ecográficos indicaron madurez fetal, y los latidos cardíacos descendieron por debajo de los 170 latidos por minuto, se realizó cesárea, naciendo un macho y una hembra viables producto de gestación en el cuerno uterino derecho, mientras que en el cuerno uterino izquierdo persistía una colecta uterina abundante. Posterior a la cesárea, la apertura del cuerno uterino izquierdo confirmó la presencia abundante de pus en toda su extensión. A modo de conclusión podemos inferir que cualquier descarga sanguinolenta o purulenta durante la preñez es anormal y debe ser investigada. Existe escasa bibliografía sobre gestación y piómetra en simultáneo en la perra, debido a ello, es limitado el conocimiento que explique de forma fehaciente la causa de esta presentación conjunta. En el caso de esta hembra, que ya poseía antecedentes de padecer dicha afección, la recurrencia era factible. Es de considerar que tanto la hiperplasia de las estructuras glandulares endometriales como la disminución de las contracciones de la pared miometrial ocasionada por esta hormona, favorece tanto la gestación como el desarrollo de piómetra. Tal vez el tratamiento inicialmente instaurado, no haya logrado resolver la piómetra en su totalidad, pero sí detener su avance posterior, sin comprometer la viabilidad de las vesículas gestacionales.