INCIHUSA   20883
INSTITUTO DE CIENCIAS HUMANAS, SOCIALES Y AMBIENTALES
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
Diez años y cien metros. Dos miradas a un paisaje a través de las casas Castanera y Raventós de Antonio Bonet Castellana, 1963-1973
Autor/es:
ISABEL DURÁ GÚRPIDE; PABLO LLORCA
Lugar:
Pamplona
Reunión:
Congreso; X Congreso Internacional de Historia de la Arquitectura Moderna: Arquitectura Importada y Exportada de España y Portugal (1925-1975); 2016
Institución organizadora:
Universidad de Navarra
Resumen:
La Cala de Palafrugell, en la Costa Brava, fue el enclave donde Antonio Bonet Castellana (Barcelona, 1913-1989) tuvo la oportunidad de construir dos grandes casas en diferentes etapas de su carrera profesional. Una de ellas, durante los intensos años en los que se convirtió en un arquitecto transatlántico, cuando proyectaba sus obras desde Buenos Aires y atendía la creciente actividad en sus oficinas de Madrid y Barcelona. La otra, cuando había regresado definitivamente a España y se había establecido en su ciudad natal. La casa Castanera (1964) constituyó el último caso de una serie de obras y proyectos caracterizados por la experimentación con retículas bidimensionales y tridimensionales. Inicialmente esta familia, formada por las casas BGB (1950), La Paloma (1952), Closas (1953), Oks (1953) y Perojo (1963), se desarrolló en la topografía horizontal de la llanura pampeana argentina, mantuvo un fuerte contenido tecnológico y manifestó la filiación plástica con las ideas promovidas por los artistas surgidos del Movimiento Arte Concreto Invención. No obstante, en el traslado a la Costa Brava, todo este modelo ?americano? entró en diálogo con la tradición constructiva mediterránea y la topografía accidentada.Diez años después, cuando Bonet había alcanzado los 60 años de edad, recibió el encargo de la casa Raventós, en un terreno ubicado a cien metros de la casa Castanera. Entonces, se enfrentó al mismo paisaje pero con otra estrategia; construyó el último eslabón de una familia de proyectos en los que había experimentado con plataformas pétreas que permitían la transición del objeto arquitectónico y la topografía escarpada. Este modelo lo había asimilado durante sus años junto a José Luis Sert, y construido por primera vez en América, en su propia casa de Punta Ballena, La Riconada (1948). Luego lo trasladó a España en la Casa T3 del Club de Golf de Puigcerdá (1964) y Nieto Antúnez (1964). Sin embargo, la plataforma habitada de la casa Raventós demostraba una condición más primitiva, característica presente en la etapa final de la obra de Bonet.Esta comunicación pretende identificar las reflexiones que dan sustento a estos dos modelos, iniciados en América y concluidos en la Costa Brava. Dos obras que se presentan como dos miradas alternativas de un mismo arquitecto respecto de un mismo lugar; que articulan de diferente modo las nociones de lo doméstico, lo material y lo territorial. Dos relatos entendidos desde la experimentación, condición invariante de la arquitectura de Antonio Bonet Castellana.