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Este trabajo da cuenta de una experiencia de investigación basada en los postulados de la epistemología y metodología feminista, de género. En concreto, referimos a un observatorio de medios de comunicación construido en el marco del Proyecto bienal de investigación SECTyP-UNCuyo (2013-2015) ?Lenguajes, discursos, decires. Análisis de representaciones, relatos y experiencias de y sobre mujeres? (Dir. Dra. Valeria F. Hasan). Tanto el observatorio como el proyecto en el que se inscribe, se insertan en el campo conformado por los estudios en comunicología y perspectiva de género/feminista que, desde nuestra mirada, son estudios profundamente políticos en tanto contribuyen al ensanchamiento de la comunicología como disciplina, por un lado, de los estudios de género por el otro, pero sobre todo y de manera muy importante, en y para la vida concreta de mujeres, niñas y adolescentes. En relación a ello, asumimos las premisas del conocimiento situado y del punto de vista (Harding, 1986, 1998; Haraway, 1995) que parten del reconocimiento del carácter socialmente situado de las creencias. Donna Haraway al presentar una epistemología de la localización, del posicionamiento y de la situación, sostiene que la parcialidad y no la universalidad, es la condición que permite lograr un conocimiento racional. Sandra Harding, por su parte, explica que este posicionamiento tiene que ver con una respuesta al reconocimiento de que las creencias y comportamientos culturales, políticos e ideológicos de las investigadoras feministas moldean los resultados de sus análisis tanto como lo hacen los de los investigadores sexistas y androcéntricos (Fernández Hasan, 2011). La objetividad feminista resulta una objetividad encarnada que provee conocimientos situados, en otras palabras, la "objetividad fuerte" proporcionada por el punto de vista feminista se opone a la noción tradicional de "objetividad" masculina, patriarcal, androcéntrica (Fernández Hasan, 2011).Referido a la articulación entre medios de comunicación y perspectiva de género/feminista, la periodista Sandra Chaher (2007) señala que en la década del 90?, época signada por la globalización, los avances tecnológicos y la concentración mediática, desde el movimiento de mujeres se gestaron espacios de reflexión en los que la comunicación ocupó un lugar central. Se destacó en 1995 la Conferencia Mundial de la Mujer, que tuvo lugar en Beijing y que incluyó como sección especial la ?Sección J? referida a la articulación entre medios y mujeres. En este marco, con el fin de generar nuevos modelos de conocimiento, surgieron los monitoreos de medios como respuesta a la preocupación sostenida sobre las construcciones de sentido que expresan las producciones mediáticas y periodísticas acerca de las mujeres, sus temas y problemas. En torno a los observatorios sobre temas de género, Chaher (2007) sostiene que constituyen una valiosa herramienta de análisis para develar los mecanismos de construcción de estereotipos sociales de género y permiten la creación de un nuevo tipo de conocimiento que sirve al movimiento de mujeres y a la sociedad civil en general en su vínculo con los medios de comunicación, a la vez que constituyen un elemento para el diseño de políticas públicas en materia de comunicación y género. En el contexto de lo dicho hasta aquí, la presente ponencia repasa la experiencia del ?Observatorio Medios de Comunicación, género y mujeres: problemática del aborto ? interrupción voluntaria del embarazo?. El corpus de análisis se conformó con artículos periodísticos que versaron sobre la práctica del aborto y que fueron publicados entre el 1 de enero y el 30 de septiembre de 2014, en los portales web de medios de la provincia de Mendoza: Los Andes, Uno, MDZ, Edición Uncuyo. Cabe mencionar que se utilizó una metodología que combinó aspectos cuantitativos y cualitativos. En cuanto a los primeros, se confeccionó una planilla para relevar una serie de datos iniciales; en tanto que el análisis cualitativo tuvo por objetivo profundizar sobre ciertos niveles de sentido mediante herramientas del análisis social del discurso y de la economía política de la comunicación. La construcción de nuestro tema de estudio, es decir, el aborto-interrupción voluntaria del embarazo, de las categorías de análisis en suma con los lineamientos teóricos que guiaron el trabajo y la interpretación de los datos relevados y sistematizados, partieron y estuvieron en permanente articulación con los postulados de la epistemología feminista y la perspectiva de género. Esto vale destacarlo porque, sin dudas, la experiencia que relatamos y los resultados destacados que presentamos serían otros y/o muy distintos si no hubiésemos asumido dicho enfoque. En este orden, nos parece imperioso reflexionar respecto a la relación entre investigación en comunicación, periodismo y acción política. Cuando hablamos del derecho de las mujeres a decidir sobre nuestros cuerpos nos encontramos con múltiples formas de violencia, discriminación y desigualdad. Uno de los puntos/lugares en donde se asienta el patriarcado es en el cuerpo de las mujeres mediante el control de su sexualidad y de sus capacidades (no) reproductivas. El problema del aborto directamente conectado con el derecho de las mujeres a decidir sobre sus propios cuerpos, toca un núcleo de dominación y sujeción de las mismas que es necesario, para el sistema patriarcal, silenciar, ocultar o, en todo caso, distorsionar. En esto, los medios de comunicación son centrales porque son actores concretos que tienen una ubicación privilegiada en las estructuras de la sociedad y detentan poder material y simbólico.